domingo, 30 de enero de 2022

Con 9 años, me pega una vecina y mi mamá

Paula , tiene 12 años, va de camino a su casa, cuando está a una calle de casa, ve salir a un chico como de unos 9 años, con una bata del cole blanca, al verlo cerrar la puerta, queda impactada al ver su pequeño culo sobresalir de su bata blanca, pareciera como que el chico estuviera desnudo bajo su bata.

Hola, Paula le dice: Vas para la escuela?

Si, responde la niña, pero la verdad no tengo ganas de ir hoy.

Porqué?

La maestra va a tomar lección y yo no estudié mucho....

Mira, yo vivo a una calle de aquí, mis padres trabajan y no llegan hasta tarde, si tus padres no se dan cuenta, te puedes quedar conmigo.

Vale !!!. La maestra tomará lección , no una prueba escrita, y mis padres no tienen por qué enterarse de mi ausencia.

Y que hay con los deberes...

Tengo un amigo al que iré y le pediré los deberes.

¿Como te llamas y cuántos años tienes ?

Adrián y tengo 9 años, estoy en 3º de Primaria.

Yo, me llamo Paula  y tengo 12 años, voy a 1º año de la secundaria, pero hoy tenemos desinfección.

Adrián estaba contento de compartir la tarde con un chico mayor, de 12 años que iba a la secundaria, se sentía halagado que lo haya escogido para pasar la tarde.

Bueno, ven a mi casa, lo pasaremos bien, que raro que viviendo a una calle no te haya visto antes.

Es que me mudé hace poco, este es mi primer año en el barrio, respondió Adrián.

Adrián es un chico blanco y apuesto de pelo oscuro, un poco bajo para su edad. Paula tiene la piel un poco más oscura, pero es igual de apuesta, más alta que las otras niñas de su edad, los dos parecen como atraerse. Adrián al sentir que un chico más grande le dio importancia y Paula al quedar impactada por el culito del chico.

Llegaron a la casa, ven pasa Adrián, ponte cómodo, sácate la bata

Gracias...

Adrián se la quita y la pone sobre una silla. Esta vestido con una camiseta blanca y pantalones cortos blancos.

Sabés, le dice Paula, parecía que no llevabas nada bajo la bata del cole, de la manera como se te notaba el culito.

No, llevaba un pantalón corto, dice Adrián sonriendo y un poco sonrojado.

Quieres tomar o comer algo?

Ahora no, luego sí. Respondió Adrián.

Sabés, si mis padres se enteraban de que yo había hecho campana, seguro que me hubieran dado unas buenas nalgadas y con el culo al aire. A ti te dan nalgadas ?

No, solo una nalgada muy de vez en cuando, pero sobre los pantalones.

Tú has hecho campana, has faltado al colegio sin autorización de tus padres y te mereces unas buenas nalgadas en tu culito al aire, dice Paula ... un poco en broma, pero también esperando la respuesta de Adrián....

Adrián responde sonriendo, si tú me las quieres dar, estoy dispuesto....

Pula se sorprendió. ¿Hablas en serio Adrián?

Mirá, no sé, a veces cuando mis amigos hablan sobre las nalgadas que sus padres le dan, me hace sentir un poco de curiosidad, no sé ...

Quieres probar ?

Adrián piensa por un momento y dice ... Bueno, vale... como va a ser ?

Mira, para probar tiene que ser una paliza de verdad, si no, no sirve, te pones sobre mi regazo, te bajo los pantalones y calzoncillos y te pego con la mano en tu culito hasta que quede bien... bien rojo....y empieces a llorar...

Hummm..... no sé, pero lo que me dices, me hace sentir vergüenza. De que me veas la tita, (pene).

Entonces ?

Si, Paula, he sido un chico malo, falté a la escuela sin autorización y merezco unos buenos azotes en el culo hasta que me quede bien rojo...

Paula no lo podía creer, pronto vería esa culito que lo había impactado tanto, y no sólo eso, le daría unas buenas nalgadas hasta dejársela muy... muy rojo.

Bien Adrián, prepárate, ven aquí, mientras agarra una silla y se sienta.

Si, Paula...

Adrián obedece...

Ahora inclínate sobre mi regazo.

Adrián se inclina, entonces Paula  agarra el elástico de los pantalones cortos y los baja hasta pasar la rodilla, luego hace lo mismo con los calzoncillos, los baja y los une con los pantalones, luego levanta un poco la camiseta blanca hasta que queda el pequeño culo completamente expuesto.

¡¡¡¡ QUE CULITO QUE TIENES!!! NO ME HABÍA EQUIVOCADO CUANDO LA VI TAPADO POR LA BATA DEL COLE, AHORA ESTÁ COMPLETAMENTE AL AIRE, ESPERANDO POR UNA MERECIDA PALIZA !!!

Adrián, que está inclinado sobre el regazo, con las manos tocando el sueli y mirando al suelo dijo: ¿PABLO, ME VA A DOLER?.

Antes de darle una respuesta, Paula , empieza a acariciar y masajear el culito, está deslumbrado ante tanta belleza. Acaricia, masajea, separa las nalgas, observa el orificio anal: rosadito, hermoso, vuelve a masajear, acariciar y entonces dice: Sí, va a doler. ¿Estás listo? :

Sí, empieza.

SPANK... AYYYY. SPANK... AYYY.... SPANK... AY.... SPANK... SPANK... AY......

Paula pega por todo el pequeño culo de Adrián que va tomando color rojo, el empieza pegando fuerte, pero lentamente , luego va adquiriendo más velocidad, pega cada vez más fuerte y más rápido, no dejando ningún centímetro cuadrado del culito sin azotar....

Adrián está empieza a sentir mucho dolor y empieza a llorar, pero Paula dijo que sería una paliza real, y sigue pegando....

SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY... SNIFF... SNIFF...

El culito de Adrián está de color rojo intenso y brillante, entonces Paula dice: son las últimas 50 nalgadas y van a ser muy fuertes... Quiero que cuentes y digas ... 1... gracias por pegarme en el culito, Paula...así hasta las 50.

Sí Paula, responde Adrian llorando..... SNIF... SNIF...

SPANK..... AYY....

1... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo... Dice Adrián...

...............................................................................................................

SPANK.... AYY...

48 .... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo...

SPANK.... AYY...

49 .... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo...

Y

SPAAANNNNKKKK.... AAYYYYYYYY....

50... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo.......

Bueno, está bien Adrián ya terminamos... dice Paula dándole unos pequeños golpecitos finales en el culito a Adrián que está más rojo que un tomate y más ardiente que el fuego.

Paula le dice que descanse un poco en su regazo, mientras contempla su obra, acariciando y masajeando suavemente su culito.

Luego de 5 minutos, le dice a Adrián que se levante, él lo hace, frotándose sus nalgas bien azotadas y dando saltitos.

Espérame, dice Paula....

Paula vuelve con una crema suavizante y dice ponte nuevamente sobre mi regazo, entonces Paula pasa la crema por todo el culito de Adrián 

AHHHHH.... Responde Adrián aliviado... que bien se siente...

Paula sigue pasando, masajeando y acariciando no solo las nalgas, también el orificio anal.

¿Qué te pareció. Adri? dice Paula

Dolió mucho, pero me gustó....

Ya vi... como se te paraba tu pequeña tita (pene) dice Paula sonriéndose...

Pasaron la tarde jugando a la videoconsola, hasta que llegó la hora de volver a casa y fingir que había ido al cole.

Se despidieron no pudiendo los dos creer lo que había pasado esa maravillosa tarde:

Paula, al quedar impactada con el culito que sobresalía del chico, lo invita a su casa, hace que se incline en su regazo, y en su hermoso culito al aire, le da nalgadas hasta dejárselo muy...muy... rojo.

Para Adrián había sido un experiencia intensa y alucinante, en vez de pasar al frente en la escuela, había recibido duras nalgadas en su culito desnudo por primera vez.

Pasaron cuatro días y la mamá de Adrián se enteró que no había ido a clase : Le preguntó furiosa, Donde Estuviste ? En la Fábrica Abandonada, respondió Adrián.

Cómo en la Fábrica Abandonada ? . Estás loco ? No sabes los peligros que hay para un chico de 9 años, pasarse toda la tarde en ese lugar. Tenés suerte que no te pasó nada....

Entonces pasó algo que Adrián no esperaba, su mamá, lo tomó de una oreja, se sentó y puso a Adrián sobre su regazo y le bajo los pantalones y calzoncillos, para su suerte el culito de Adrián estaba blanco como la espuma, pero no por mucho tiempo, su mamá le dio sus primeras nalgadas fuertes en su culito desnudo, después de 20 minutos de intenso castigo con la mano, su culito quedó más rojo que un tomate y el llorando como un bebé.

Ahora sabía que tenía que ser cuidadoso en sus futuros encuentros con Paula, no por las nalgadas que le podía dar su mamá, sino para que no se estropear esa hermosa relación que empezaron a tener juntos.

LA VISITA DEL SR SPENCER 2

  El sonido del timbre resonó por la gran casa suburbana, y se pudo escuchar el ruido de pequeños pies descalzos mientras el niño más cercan...