domingo, 30 de enero de 2022

El Doctor Satiuglan Sajor



El Doctor Satiuglan Sajor

Autor: Mauricio Zamora 

Está historia tuvo lugar en un colegio, que tenia el despacho médico en su interior...
En este colegio no había uniforme para las alumnas así que podían vestir como quisieran, pero de una manera decente...sin coquetería, eso si, no estaba permitido el maquillaje ni las uñas largas.
Todo empezó un día viernes, ese día tenían examen de matemáticas, las chicas del sexto curso.....En ese curso estudiaba Jessica una niña (señorita) muy guapa media 1m65cm,era de piel blanca pelo rubio, y tenía unos ojos verdes muy grandes y bonitos...su cuerpo era espectacular tenia unos pechos bien duritos y de un buen tamaño, una cintura pequeña y un trasero descomunal, redondo y respingón ..en fin era la más guapa del colegio.
Jessica no era muy buena alumna descuidaba constantemente sus estudios, razón por la cuál el día del examen decidió fingir estar enferma para no realizar el examen y de esta manera evitar un castigo de sus padres que eran muy estrictos....
Pero ella no contaba con lo que le podía costar la bromita, sucedió así :  
A los 11 de la mañana Jessica luego de fingir estar enferma fue enviada al despacho médico, por el profesor de matemáticas, al llegar allí toco la puerta y una voz muy varonil la dijo pase, al entrar el Dr Satiuglan quedo impresionado, era Jessica vestía un pantalón vaquero azul que le quedaba apretado, como les gusta vestir a las chicas, parecía que su trasero quería salirse de el, una camisa sport de color negro y una chaqueta que era conjunto del pantalón vaquero.......Luego de un momento el Dr. reaccionó y la invitó a sentarse...que es lo que te pasa preguntó el Dr.?....Jessica contestó me encuentro muy mal me duele la garganta y tengo fiebre....
Pasa acá le dijo el Dr. quítate la chaqueta y siéntate sobre la camilla te voy a revisar....Jessica obedeció...entonces luego de revisarle la garganta, el pecho y el corazón el Dr. Dijo, no pareces tener nada, ahora acuéstate boca abajo y bájate los pantalones te voy a tomar la temperatura.....Jessica  dijo per....o     no me la toma por la boca.....No dijo el Dr.   aquí solo tenemos el termómetro rectal....Date prisa, le ordenó con voz autoritaria mientras tomaba el termómetro y una cajita con vaselina...Jessica muy nerviosa y con la cara roja de la vergüenza, obedeció.... Entonces se acerco el Dr. y luego de bajarle las braguitas hasta las rodillas, con los dedos de su mano izquierda separo las nalguitas de Jessica e introdujo suavemente el termómetro unos tres centímetros, sólo se escuchó un leve quejido de Jessy  AHhhh....no sufras le dijo el Dr. serán sólo  un par de minutos,,,,pasados los 2 minutos el Dr. saco el instrumento del culito de Jessy de un sólo tirón y nuevamente Ohhhh  se quejo Jessy y llevo su mano al trasero, ya está le dijo el Dr. puedes vestirte, Jessy aun avergonzada se puso de pie subió sus braguitas y luego el pantalón...El Dr. miro el termómetro y comprobó que todo era normal...En ese momento le dijo mira Jessica tú no tienes nada ,,todo esto a sido otra de tus trampas para evitar el examen....Jessica dijo NO..NO....me duele mucho...Silencio gritó el Dr. voy a mandarles una nota a tus padres para que tomen medidas,,ven aquí siéntate y espera....Rápidamente Jessica suplico No por favor Dr. no les avise a mis padres....Lo que has hecho esta muy mal le dijo el Dr. Satiuglan,y mereces un castigo, así que aviso a tus padres o ahora mismo te castigo yo......
Jessica agacho la cabeza y sabiendo con la severidad que la castigarían sus padres, además de prohibirle salir durante un buen tiempo.......con voz temblorosa y sin mirarle a la cara dijo,,,mis padres no por favor, Castígueme usted Dr...............Muy bien dijo el  Dr. y tomando su silla la colocó en medio del despacho, se dirigió a la puerta y echó el cerrojo, se dirigió a la silla, se sentó y le dijo Jessica, vas a recibir un castigo que no vas a olvidar durante mucho tiempo, pues tus nalgas te lo van a recordar a diario cada vez que te sientes.....Túmbate sobre mis rodillas le ordenó. Ante esto Jessica se exaltó y advirtiendo lo que se le venía encima le dijo, no por favor no!!!!!!! entonces el Dr. le tiro con fuerza del brazo y la situó sobre sus rodillas, ahí estaba el culo más perfecto del colegio a su entera disposición para ser castigado...Coloco su mano derecha sobre su cintura e inmediatamente pasó a azotarla, una a una caían las nalgadas con fuerza pero no muy seguidas alternando,1 derecha y 1 izquierda....al principio Jessica estaba quieta sorprendida talvez por lo que le estaba sucediendo, pero según aumentaban las nalgadas empezaba a quejarse ,plass ...AUhhhh plashhhh Auhhhh,y asi durante unos 5 minutos, no más por favor decía la chiquilla, en ese momento la levanto......y rápidamente Jessica empezó a frotarse el trasero que ya le dolía, ella pensó que eso era todo,,,pero no fue así ...El Dr. le dijo que esto era sólo un calentamiento y le dijo que se desnudara de cintura para abajo que su castigo aún no había terminado,.....y mientras más tardes en obedecer va a ser peor.....Ante esto Jessy pensó que lo mejor era obedecer así que se quito el pantalón y luego las bragas quedando totalmente al aire su culito que ya había perdido su color natural, ahora era de un color rojizo pero no muy intenso....Nuevamente la tumbo sobre sus rodillas y empezó de nuevo la descarga de nalgadas que ahora hacían más daño ya que nada protegía las nalguitas de Jessy,El DR SATIUGLAN estaba disfrutando, con el castigo le daba 6 nalgadas seguidas,3 en la derecha,3 en la izquierda y luego la masajeaba el trasero, así siguió durante otros 5 minutos, durante este tiempo Jessica ya lloraba y suplicaba que parara, pues ya sentía el calor en su trasero que ya tenía un color mas rojizo .....En ese momento el Dr. le ordenó que se pusiera de pie y que se frotara el trasero para aliviarlo un poco,,Jessica se puso de pie y según se masajeaba su trasero empezó a sentir una extraña sensación de placer, que no se lo explicaba pues el dolor de su culito decía lo contrario....
Luego de dejarla descansar 2 minutos, el Dr. se quito la bata y luego empezó a sacar su cinturón lentamente ,lo doblo por la mitad y ordeno a Jessica colocarse acostada sobre la camilla con un cojín bajo su vientre para tener una mejor vista de su trasero,,,como es de suponerse esto no le gusto nada a Jessy,y le dijo que ya había recibido suficiente castigo, negándose a obedecerle,,,pero en ese momento el Dr. le recordó que le iría peor y si no obedecía cumpliría su amenaza de comunicar su falta a sus padres. Entonces Jessica obedeció, en medio de lloros y lamentos se tumbo en la camilla....Se acerco el cruel Dr. se colocó a 1m de ella agito su cinturón en el aire y empezó a azotarla, luego de cada correazo PLAFFFF,AYYYY gritaba Jessy y llevaba las manos a su trasero, así siguió el castigo hasta llegar a 20 golpes con el cinturón luego de los cuales Jessica permaneció acostada, frotandose su dolorido trasero que ya tenía un color rojo carmesí,..No paraba de llorar,,,hasta que un raro sonido llamo su atención era el silbido de la cane que su cruel castigador agitaba en el aire......De pie ordeno el cruel Dr. vas a recibir 12 varazos para finalizar tu merecido castigo,,,,nuevamente no sin antes rechistar Jessica obedeció Se levanto de la camilla y caminó hasta el escritorio del Dr. ,túmbate aquí y coloca tus manos en el otro extremo, por cada vez que te sueltes para tocarte el trasero te daré 2 más entendido?....S...i   SNifff   Y se colocó, es indescriptible relatar lo hermoso que se veía su culo en esa posición....
Jessica vas a contar uno por uno los varazos....
Levanto su mano y con Fuerza dejo caer el primer azote. Splashhh ...AYYYY 1,,Splashhhh 2  ...............Splashhh11.....y   Splashhh12  Gracias Dr. dijo Jessica ,,para sorpresa de este¡¡¡¡¡¡.....Había resistido los 12 golpes sin desobedecer ...
Ya hemos terminado dijo el Dr. ,ayudo a incorporarse a Jessica. Miró detenidamente su trasero era rojo intenso y tenía 12 delgadas líneas que le habían dejado los golpes de la cane......le dio una palmadita en el centro del trasero y le dijo ..ya te puedes vestir,,,,Así lo hizo Jessy se coloco las bragas y el pantalón con mucha dificultad....el la miraba satisfecho de su obra,,,a la vez que le decía, talvez tú olvides este castigo al cruzar la puerta...Pero como te dije TUS NALGUITAS TE LO RECORDARAN DURANTE MUCHO TIEMPO.......Te puedes ir.....Según salía caminando muy despacio y aún sobándose el culito, miró a su cruel Dr....que lo miraba con una morbosa sonrisa..... Cerro la puerta y se marcho....
NOTA.....Han pasado ya quince días del castigo que JESSICA recibió del
DR. SATIUGLAN  SAJOR......y ella ya esta pensando en qué hacer para volver a su  Despacho...........................FIN...
 

Mi tutora del internado


Nunca pense que la estancia en un internado para chicas me la pasaria en las rodillas de mi tutora.

Empezare por explicar que me crie en una familia tradicional con una madre y un padre, aunque este viajaba mucho, ya que tenia un buen puesto en un banco que no interesa el nombre, por lo que poco tiempo pasaba en casa y que decir del poco caso que me hacia, ya no solo por sus escasas visitas a casa sino que como todo hombre machista, lo que el queria era un niño, pero el destino hizo que me tuviese a mi, una niña algo timida y con muchos problemas interiores que con el tiempo iria resolviendo.

Cuando tenia 14 me quede huerfana de madre, asi que mi padre tenia que decidir o llevarme con el de viaje y realizar una vida no muy conveniente para una niña, o la otra alternativa era ir a vivir con mi abuela paterna, que era igual de arisca que su hijo o la peor de todas ir a un colegio interno en Londres; al final eligio la ultima, ya que parecia la que mas me convendria a futuro, eso penso mi padre en ese momento, aunque no sabia lo que realmente experimentaria en aquel lugar y las consecuencias que acarrearia. Ya de ante mano me advirtio que en aquel colegio las cosas eran muy diferentes a las de aqui, y que alli impartian castigos corporales, lo cual me ayudarian en mi desarrollo como persona y a convertirme en una persona responsable.

Recuerdo que a estas indicaciones de mi padre no les preste mucha atencion, ya que pensaba que a mi no me ocurriria nada de eso, ya que yo en el colegio era una chica que sacaba buenas notas y nunca habia tenido problemas con nadie y mucho menos con ningun profesor, asi que no hice mucho caso y me fui a Londres con intenciones de pasar alli los proximos cuatro años de mi vida recluida en una vieja mansion con todo chicas repipis y viejas profesoras crueles y amargadas por tener que educar a niñas que las aborrecian. Cual fue mi sorpresa que al llegar alli con mi padre, a las puertas de tenebrosa mansion, me encontre con unas instalaciones totalmente modernas y no solo con chicas sino que tambien habia chicos. Entonces la cosa fue tomando otro color y ya no estaba tan asustada de tener que pasar alli el resto de mi adolescencia. La directora salio a recibirnos, una mujer de 45 años, alta, rubia, toda ella muy estirada con aires y maneras tipicas inglesas y un acento español muy forzado que daba algo de espanto escucharla. Despues de varias horas recorriendo el colegio, me di cuenta de que no era para tanto y sobre todo cuando mi padre se fue y la directora me llevo a mi habitacion. Alli estaba esperando una mujer de unos 30 años aproximadamente, vestida con un traje gris y una camisa negra con los botones del cuello y los dos que le seguian abiertos, el pelo negro y corto y unos rasgos que no parecian tipicos de esa zona, y efectivamente era descendiente de italianos, y debido a su gran trayectoria como profesora de idiomas, sabia hablar perfectamente español, asi que nos entendiamos de maravilla. Bien, yo cuando llegue a mi habitacion no sabia exactamente lo que estaba haciendo esa mujer alli, pero acabe sabiendolo muy bien. Era mi tutora, se llamaba Helen. Todos los alumnos teniamos un tutor asignado, pero no por clases como en España, sino que te asignaban uno durante todo el tiempo que fueses a estar internada. Y yo por suerte estuve cuatro años bajo su tutela.

Al principio, lo pase un poco mal, porque no conocia a nadie aunque el idioma no era un empedimento, ya que desde muy pequeñita mis padres insistieron en que aprendiese idiomas, y al final acabe por saber cuatro idiomas, que progresivamente mi tutora iria ampliando. Pero despues de un tiempo, conoci a Eric y a Alan, dos chicos ingleses que se convertirian en mis mejores amigos. Con ellos pase muy buenos ratos y me fueron introduciendo en el mundo de las gamberradas y malos habitos.

La primera vez que me lleve una azotaina, fue por su culpa. Teniamos que ir a clase de preparacion fisica, una clase terriblemente aburrida, donde lo unico que haciamos era correr durante 20 minutos y despuess una serie de estiramientos con la finalidad de conocer nuestros musculos y todas esos conocimientos, y de vez en cuando teniamos una serie de ejercicios como saltar el potro o andar por la barra de equilibrio. Como mis amigos y yo eramos un poco rebeldes, decidimos que no vendria mal un poco de diversion asi que Eric y yo antes de empezar la clase, cuando no habia nadie, sacamos un par de tuercas y tornillos al potro de saltos, donde tambien se imparten algunas zurras a alumnos desobedientes. Lo que no sabiamos es que la primera persona que iba a saltar el potro aquel dia era la misma profesora, cuando vimos que iba a ser ella, los tres nos quedamos blancos y asustados aunque tambien ansiosos por ver la espectacular caida que tendria lugar, y en efecto asi fue, la Miss Smith , con un chandal azul y una camiseta blanca sin mangas se propino un tremendo batacazo contra el suelo mientras intentaba como podia agarrarse a una de las patas mientras caia. La risotada que salio de nuestras tres bocas se hizo eco por todo el gimnasio, lo cual delato nuestro crimen y fuimos llevados cada uno a nuestros respectivos tutores para que tomaran las medidas oportunas por lo sucedido. Era la primera vez que iba a ser azotada y sentia mucho miedo y temor. Helen, me miro con una mirada penetrante y muy autoritaria; estabamos en su despacho; y nada mas irse la profesora Smith me pego un bofeton en toda la cara que me tiro al suelo, solte una lagrima y le dije que no habia sido yo, que simplemente me habia reido pero que no tenia nada que ver, pero ella empezo a decirme que no tenia vergüenza, que ademas de ser una malcriada era una mentirosa y que recibiria el doble por intentar engañarla.

Me levanto del suelo de un tiron y me cogio por la oreja y me llevo hasta una puerta que estaba en la pared de detras de su escritorio, saco la llave de su bolsillo y la abrio, estaba todo oscuro, pero cuando cerro la puerta con llave y encendio la luz vi una especie de sala destinada a zurrar culos a alumnos. Alli habia una silla de madera escualida, un sofa de cuero negro muy confortable sin brazos y otros con, y una vitrinas llenas de varas, cinturones, paletas, y demas artilujios, tambien habia un potro como el que estaba en el gimnasio.

Me dijo: – Como es tu primera vez, no sere muy severa contigo, pero eso no significa que no te vaya a doler, asi que ahora bajate los pantalones.

Llevaba un mini short negro para clases de preparacion fisica, que timidamente me baje, y ella en una me agarro por mi brazo y muy suavemente me puso sobre sus rodillas. Estaba muerta de miedo, no sabia como era aquello, nunca habia estado en esa postura, y yo creo que ella se dio cuenta, porque me dijo: – tranquila pequeña, esto te vendra bien y nadie se ha muerto por una zurra.

La verdad es que sus palabras no me tranquilizaron pero me senti como una niña pequeña que iba a ser corregida por la travesura que habia hecho, y lo acepte como tal, un castigo por algo que habia hecho mal.

Me bajo las braguitas blancas que llevaba hasta los tobillos y despues me las quito y se las metio en el bolsillo derecho de su chaqueta. No sabia por que habia hecho eso, pero despues lo comprenderia. Empezo con el primer azote, que cayo sobre mi culito blanco y virgen , no fue muy fuerte, pero de todas formas se me escapo un quejido,: ayyy, ayyyy, ayyy…….pero ya cuando llevaba mas de diez la intensidad empezo a subir, y el dolor tambien, por lo que no pude evitar abrir mas las piernas y dejar ver gran parte de mi, y lo que no comprendia era que lo que me estaba haciendo me estaba gustando mucho, y me invadia una sensacion de placer y dolor muy dificil de explicar, fue entonces cuando ella se dio cuanta de que me estaba poniendo humeda, entonces me empezo a pegar cada vez mas fuerte, cada azote que me daba me dolia mas y no podia parar de gritar : ayyy, por favor para,zzzaaasss, ayyyyyy, zzzassssss,ayyyyyyy no lo volvere a hacer, pero Helen seguia calentandome el trasero. Cuando llego a 50 paro y me dijo: – esto si que te va a gustar, pequeña mia.

Me cogio el brazo izquierdo y me lo agarro muy fuerte contra mi espalda, y con los dedos de su mano derecha se introdujo en mi vagina, la verdad es que mi coño se lo estaba piendo, no le costo nada, a pesar de que yo era virgen. Despues los saco y con su dedo pulgar me lo metio por el culo, nunca habia sentido nada igual. Me dijo:

-Como te muevas o grites, te pegare hasta que no puedas sentarte, ¡¡ahora abre las piernas!!

Asi que me quede totalmente quieta y abri mas las piernas, como me habia dicho. Estaba en esa postura tan humillante, sobre las rodillas de mi tutora y totalmente humeda, y lo mejor es que me gustaba sentirme asi, sumisa y bajo el control de una mujer que me doblaba la edad, y que tenia todo poder sobre mi. Empezo a meter y sacarme el dedo muy suavemente y poco a poco lo fue haciendo mas rapido y con fuerza, queria gritar y retorcerme pero no por el dolor , sino por el placer que me producia su dedo al entrar y salir por mi ano, pero no me pude contener y solte un pequeño quejido:

ahhhh,

al ver que ella no le importo, segui gimiedo, pero con mas ganas:

aaahhh, aaaahhh, aaaaahhh,

parece que a ella le gustaba que me quejara, porque me metio dos o tres dedos, que habia rozado por los labios y habia tocado mi clitoris, eso me hizo aumentar mi exitacion aun mas, y depues de que castigara mi ano de esa manera logre un orgasmo increible, como nunca, era una sensacion muy extraña, me convulsionaba sobre sus piernas sin poder moverme, y me corri tanto que moje sus pantalon.

Te ha gustado, verdad. Bien, pues vete a tu cuarto y despues de la cena esperame desnuda y boca a bajo sobre tu cama, que seguire el castigo por mentirme ¡¡¡vamos!!!

Me recompuse como pude de aquella situacion, me vesti y sali corriendo. Llegue a mi habitacion y lo primero que hice fue pegarme una buena ducha, despues me fui al resto de mis clases.

Cuando llego la hora de la cena, la vi en el comedor sentada con el resto de profesores, apenas la mire y ella me devolvio la mirada con un gesto inequivoco y amenazante de lo que me esperaria esa noche, no le importo que alguien se diese cuenta, y alguna de mis compañeras ya me dijo en tono burlon: ¡¡ parece que te vas a ir con el culo caliente esta noche a la cama!! Era muy normal la aplicacion de castigo corporales durante la noche, porque durante la cena informaban a los tutores de las hazañas de sus alumnos que habian hecho durante el dia, y era una forma segura de encontrar a los alumnos, cada uno en su habitacion.

Los nervios me comian por dentro, tenia miedo de que me volviese a pegar, era todo muy confuso, pero tambien queria a volver a sentirme como una niña pequeña sobre sus rodillas.

Despues de media hora en mi habitacion desnuda y boca abajo, abrio la puerta que estaba cerrada con llave, y aparecio mi tutora con una cara muy sadica:

muy bien, mi nena, ¡¡pensaba que te habrias olvidado!!

De repente se saco el cinturon que llevaba puesto:

Esta es la segunda parte del castigo, por intentarme engañar esta mañana, pero ahora vas a contarlos en voz alta:

Zaassss

Ayyyyyy, uno

Zaaasssssss

Ayyyyyyy, dos

Zaaasssss

Ayyyyy, tres……..

Zasssss

Ayyyyyyyy, por favor, por favor,,,,,,paraaaa

Asi hasta que conte 25, el castigo se me hizo eterno porque no sabia cuantos me iba a pegar.

Me hizo incorporarme y sentarme en la cama, yo lloraba desconsoladamente, entonces se sento y me abrazo muy fuerte contra su pecho:

Espero que no vuelvas a intentar engañarme o sino sere muy dura contigo y no me compadecere de ti, las travesuras al fin y al cabo son propias de la edad, pero que me faltes al respeto no lo consiento y menos a ti, ¿esta claro?

Si, Helen.

Despues de esa vez, nunca se me ocurrio volver a mentirle, pero no por eso, no deje de darle motivos para que me castigase en su cuarto «especial», incluso a veces me portaba mal para a proposito para ponerme voluntariamente sobre sus rodillas.

Con 14 años, unas mellizas me pegan en el culo - Parte 3


Después de almorzar en mi casa, me cambié de ropa, me puse el chándal del cole y me fui para el encuentro con las mellizas, caminando me corrían hormigas por el estómago de los nervios, las mellizas eran fuertes que yo.

Tres de la tarde, toqué timbre, se abrió la puerta, soy Alexia, pasa, dijo, pensábamos que no ibas a venir... Pasé.. hey, te cambiaste dijeron, date vuelta dijo Lucía, se nota más el culito con ese pantalón.

Comiste dijo Alexia, Si, Entonces empecemos....Que te parece como precalentamiento nalgadas en tu culo desnudo por parte de nosotras dos , Si, dije, cuantas?...., 10 minutos cada uno, sobre nuestro regazo dijo.. Ok. Contesté...

Alexia se sentó en el sillón grande, con Lucía al lado, ven pon la parte del culo sobre mi regazo y apoya las piernas de Lucía y las manos en el suelo. Yo lo hice poniendo el culito en regazo de Alexia, poniendo las piernas en el regazo de Lucía y apoyando las manos en el suelo, entonces Alexia agarró la cintura del pantalón azul y los bajo, junto con mis calzoncillos, Lucía los tomo cerca de mis rodillas y los puso en mis tobillos... ¡ Qué lindo culito, que tienes, dijo Alexia, Lucía agregó como te voy a poner!!!. Alexia empezó SPANK. SPANK. SPANK. AY AY AY... Te duele dijo, si pero me gusta, entonces siguió pegando, pegando muy muy fuerte, mi culo estaba empezando a tener un color cada vez más rojo... entonces Alexia separo mis nalgas para ver mi agujero... míralo Lucia que lindo... rosadito... virgen... Alexia siguió pegando hasta llegar a los 10 minutos dejándome mi culo bien rojo... entonces me hicieron levantar e invirtieron los roles, estaba ahora sobre el regazo de Lucía, mientras Alexia observaba su obra, mi culo bien... bien rojo y llegaron las nalgadas de Lucía, SPANK.. SPANK... Ella pegaba más lenta, pero más fuerte, cada palmada era terrible, también abrió mis nalgas para ver mi agujero rosado... No veo el momento de ponerte un supositorio, dice Lucia, mientras Alexia, dice deja las nalgas abiertas y entonces Alexia pasó la lengua por mi agujero, Esto estaba fuera de programa, digo, pero Alexia dijo, que hermoso agujerito... y lo sigue lamiendo y chupando, mientras abría mis nalgas , yo le levantaba más el culo, entonces Lucia dice, yo también se lo quiero chupar, entonces Lucía vuelve a las nalgadas y esta vez aumentando el ritmo SPANK... SPANK.... AY. Ay... al cabo de 10 minutos mi culo estaba más rojo que un tomate, entonces me hacen parar y Lucía dice ahora me toca a mí, ¿Qué? digo yo, si chuparte el culito, entonces procede estando parado a abrirme las nalgas y chuparme el agujero AHHH... Que delicia.. dice... y pasa la lengua no solo por mi agujero... sino por toda mi raya y besa mis nalgas rojas ardientes....

Bueno, ahora viene Suck y Fuck, dijo Ale, como dije: chupada y cogida... pero no habíamos hablado de chupada... le dije. Dale dijo Alexia, te va a gustar. Bueno, está bien, dije y asentí..

Entonces Lucia, dijo que te parece si nos desnudamos también nosotras? si, contestamos, todos...

Entonces Alexia se puso atrás de mi culo con un plug y Lucia enfrente de mi cara. Alexia, dijo espera que voy a buscar vaselina... Fue y volvió.... Dale dijo Lucía... Entonces yo empecé a pasar la lengua por la vaina de Lucía, apoyando mis manos en sus nalgas masajeándoselas para excitarla más... AHHH... dice Lucía... al tiempo que Alexia pone vaselina enterrando primero uno y luego otro dedo en mi culo para preparar la introducción de un plug... Mientras tengo la vagina de Lucía en mi cara, Alexia empieza a introducir el plug adentro de mi culo... AYYYY...Ale entonces empieza a regular la velocidad del plug vibrador y en un momento dice te duele ahora... menos... dije ... puedes seguir con Lucía?  

Si, dije, Entonces dale a sí acabamos al mismo tiempo... Yo entonces comía la vagina de Lucía... al tiempo que Alexia enterraba con fuerza el plug en el fondo de mi culo... AHHHH... AHHH... AHH... entonces se produjo casi simultáneamente a la vez que Lucía tuvo un orgasmo.

FANTÁSTICO dijeron Alexia y Lucía.

Bueno yo me levante y las mellizas me dijeron ¿Qué te pareció? DE DIEZ , DIJE!!

Ahora descansemos un poco, miremos tele, comamos, tengo un montón de sandwichs en la heladera, dijo... y bebidas, quieres cerveza? dijo, No cerveza no.. respondí, tienen gaseosa?.. Si.. también tenemos.. Entonces nos acomodamos desnudos en los sillones y pusimos tele, al ver que no había nada interesante, Alexia la apagó y puso música... era diciembre de 1998 , Alexia puso un disco LP de vinilo de Alejandro Sanz y dijo: el cantante más grande de la historia. Pasamos cerca de dos horas deleitándonos...

Entonces quedamos casi como nuevos, para seguir nuestras nalgadas...

Vamos a nuestro dormitorio dijo Alexia, que era como la coordinadora del grupo, allí, había una mesa cuadrada pequeña suficientemente alta para que me pudiera apoyar, me dijeron que me inclinara, yo lo hice quedando mi cabeza justo donde termina, y apoyando las manos en el respaldo de una silla que pusieron para estar más cómodo. Entonces sacaron de un mueble dos paletas de ping-pong... Prepárate, vamos a jugar al ping-pong con tu culo...

Y empezaron WHACK!!! pega Alexia, WHACK!!! sigue Lucía AYYYY... contestó yo y me agarro fuerte a la silla con las manos... las mellizas siguieron... WHACK!! AYYYY... WHACK!!! jugando al ping-pong con mi culo.... Al cabo de 100 golpes cada una, pararon, se terminó?, dije... con la paleta si, dijeron... y entonces cada uno saco de sus cajones del ropero los cinturones más anchos y más gruesos que tenían... Nooo... dije mirándolos... Venga Adrián , dijeron... está bien dije sonriéndome y empezaron...

SMACK !!! Ayyy... SMACK!!! Ayyyy... ¿ Cual te duele más ? los dos duelen dije... y siguieron otros 50 cinturonazos cada uno... yo ya no daba más y mi culo estaba súper rojo y lleno de marcas gruesas rojas casi violetas... entones pararon.

Volvimos a disfrutar de juegos de adultos...

Al terminar los tres nos quedamos en cama uno al lado del otro... y nos besamos en la boca... 

Finalmente, descansamos un rato, nos vestimos, y nos volvimos a besar despidiéndonos, estábamos en sábado 20 de diciembre, me dijeron si lo podíamos repetir el próximo sábado , ultimo del año, porque en enero, se iban de vacaciones... yo le dije, seguro... a ver qué cosas nuevas hacemos... les dije..

Era casi de noche cuando llegué a mi casa, mi mamá preguntó ¿Te divertiste con tus amigas? Si, le respondí. Prepárate para cenar, dijo. Cenamos, y luego fui a mi dormitorio, el día había sido intenso y agotador al igual que alucinante y maravilloso, apenas me acosté me quedé dormido como un bebé. A partir del día siguiente contaría los días para el encuentro del próximo sábado y después en enero vendría Don Romero.


Con 14 años, la última zurra de mi tía Ruth - Parte 2

Pasaron dos semanas después de la primera zurra por parte de mi tía Ruth, entonces llegué tarde por la noche, después del horario admitido, y otra vez estuve en el regazo de mi tía con mi culo desnudo, para recibir una dura nalgada, primero con su mano y luego con el cepillo de pelo, 15 minutos con cada cosa, además de los 30 minutos de intenso castigo, otra vez estuve parado en el rincón con mi culo al aire bien rojo y dolorido por otros 30 minutos.

Hasta el mes de diciembre que me fui estuve otras 4 veces castigado, una vez con cinturón apoyando el culo al aire en el brazo del sofá, otra vez mientras yo me bañaba, ella entró y me pegó con el cepillo de baño en mis nalgas desnudas y mojadas ¡Cómo me dolió!, la tercera vez volvió el cepillo de pelo sobre su regazo y la última con el remo con agujeros estando yo doblado sobre el respaldo de una silla por supuesto culo al aire, fue muy doloroso y levantó ampollas circulares en mi culo, todas previos 15 minutos de mano en su regazo, a excepción de cuando me bañaba, en ese momento me hizo doblar apoyando la manos en la pared o en las canillas, dándome 15 minutos con mano y 15 minutos con el cepillo de baño en mis nalgas mojadas y desnudas. De más está decir que aunque fue muy doloroso disfrute las nalgadas de mi tía.

Entonces, llegó el día de la despedida, fue un sábado, mi mamá vendría a buscarme para ir a mi casa, yo fui a jugar al fútbol con mis amigos... y llegué tarde... Entré estaba mi mamá, nos saludamos después de tantos meses, mi tía me regañó: llegas media hora tarde... tu mamá te estuvo esperando e igual que la comida. Bueno, perdóname tía, es el último día, por eso mismo dijo, me debes obediencia hasta el último día. Yo empezaba a entender lo que podría pasar y dije... no me pensarás castigar hoy tía... delante de mi mamá. La mire a mi mamá y le dije: dile que no a mi tía, tú ya estás aquí... Ella respondió, todavía estás a las órdenes de Tía, yo prometí que no me metería., entonces tía Ruth dijo precisamente es para que tu mamá vea que necesitas ser disciplinado todavía....

Miro a mi mamá y sonrío, entonces mi tía toma una silla y se sienta y me dice, ya sabes lo que tienes que hacer Adrián, yo me paro frente al regazo de mi tía, mi mamá estaba sentada a poca distancia atrás de mí, por lo que vería todo de frente como en primera fila... , me bajo al mismo tiempo pantalones y calzoncillos y me acomodo en el regazo de mi tía culito al aire, apoyando las manos en el piso, mi tía levanta un poco mi camiseta, para que quede todo mi culo al desnudo.

Esto es lo que tenías que haber hecho tú, Elsa dijo mi tía y empezó con las nalgadas SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY.... yo estaba excitado, no solo por recibir la paliza de mi tía, también le estaba volviendo a mostrar el culo a mi mamá, lo que creía un asunto cerrado, aunque era en una situación muy distinta, pasaron 20 minutos de intensas nalgadas con la mano, y mi culo quedó muy muy rojo... mi tía me hace señales de levantarme, pensé que había terminado, pero fue a buscar el cepillo de pelo y volvió mientras yo frotaba mi culo bien castigado y bien rojo..., entonces volví a estar en su regazo y tía Ruth empezó con el cepillo .. WHACK... WHACK... AY... AY... A los 5 minutos estaba llorando como un bebé, pero me siguió pegando hasta completar los 20 minutos, WHACK... WHACK...WHACK... AY... AY... SNIFF... SNIFF... AYYYY....WHACK... AYYY.... Y entonces terminó y me hizo levantar , me dio dos nalgadas fuertes en mi culo , levantó y sujetó la camiseta, y me hizo ir al rincón de espaldas con la nariz pegada a la pared y las manos arriba de la cabeza exhibiendo mi culo más rojo que un tomate.

¿Qué opinas?, Elsa, le dijo mi tía a mi mamá. Mi mamá respondió que respetaba su forma de disciplina, pero no la compartía, incluso dijo, que conocía casos que había niños que le gustaban las nalgadas a lo que mi tía respondió: puede ser, pero nalgadas suaves, las nalgadas como las aplicó yo son fuertes y duelen, no creo que a tu hijo le gusten, y me pregunta: ¿Adrián, te gustan las nalgadas? A lo que respondo, mandándome la parte.... NO...... Viste, dijo Tía Ruth a mi mamá...

Pasaron los 30 minutos me senté sobre una almohada, comimos, me despedí de mi tía, y me fui a mi casa, con mi mamá, cuando llegamos mi mamá sonrió y dijo: hiciste un buen trabajo, tu tía no se dio cuenta. Si mamá, viste..., yo entonces le pregunté, no quieres volver a darme nalgadas? Ella respondió: Mira me fui de un viaje con tu padre para olvidarme de lo pasado y distraerme y tú me pides que vuelva a lo mismo; pero, Mamá... verme de vuelta recibir nalgadas... no.... Mira lo que me pasó es cosa mía, si quieres recibir nalgadas busca a un amigo o amiga que te las dé, yo no tengo problema con eso, pero lo mío es asunto terminado. Está bien, .amá...voy a buscarme alguien....

El sábado siguiente fui a ver a Don Romero y quedamos que volvería a trabajar a partir de enero, ya empezaría a ver la oportunidad de repetir lo del verano pasado, de vuelta pasé por la plaza y me senté en un banco, en el banco de al lado, había dos chicas mayores que yo, rubias... diciendo, no te gustaría coger a un chico de 13, 14 años? si, dijo pero antes le daría unas buenas nalgadas en el culo... Yo no podía creer lo que estaba escuchando y me dirigí a ellas sonriéndome... ¿Lo dicen por mí?

Si, a ti te gusta, no hay problema... dale ven con nosotros... Yo me senté en el mismo banco y hablamos... que edad tienes me dijeron... 14, dije y vosotras... 17.... Y unas tetas grande. Hablaste de nalgadas, dije. Si, ¿te gustan? Me encantan, respondí.

Ellos me dijeron que viven a tres calles de la plaza, que si quería podía ir a su casa, esa tarde, ya que sus padres se habían ido a la playa por el fin de semana y tenían su casa a su disposición. Yo dije, que bueno... pero que íbamos a hacer... Pegarte en el culo dijeron...

Llegué a mi casa, le dije que a mi mamá que iba a pasar la tarde con unas amigas, me dijo que no había problema. Yo estaba excitado... dos chicas de 17 años me iban a pegar en el culo.


Con 14 años, mamá me envía con mi tía Ruth - Parte 1

Me desperté al día siguiente de haber tenido la sucesión de intensas y duras nalgadas por parte de mi mamá que había tenido en mi culo desnudo, sabiendo cómo serían a partir de ahora las nalgadas, una suave al irme a la cama y una muy intensa una vez a la semana, con una variedad de instrumentos, además de su mano. Me levanté, entré al baño para ducharme, y cuando estaba duchándome empecé a jugar con mi tita recordando lo que había pasado ayer y lo que vendría en los siguientes meses., me descargué bien, me limpié, me sequé y me vestí para ir a desayunar.

Hola mamá, dije. Hola, me contestó. ¿Cómo tienes el culo? Bien, dije, esperando a la noche... sonreí.... No, no va a ver noche... ella dijo ,lo de ayer me parece, que se excedió de las circunstancias, los dos gozamos con esa situación, una situación que en lugar de ser una situación de castigo, se volvió completamente erótica.

Pero, mamá... que tiene si nos gusta a los dos... Eso, yo soy tu madre y estoy haciendo un papel que no me corresponde , como una compañera sexual. Pero.. mamá ..dije... no hubo nada de sexual... inclusive me diste la toalla para eso....

Pero hubo excitación, de parte tuya lo puedo llegar a entender, eres un adolescente lleno de testosterona,... pero no de parte mía..., y me sentí excitada al darte nalgadas, por más que no haya habido ningún contacto sexual.

Y... mamá... No me vas a seguir pegándome más en el culo?. No hijo, no de parte mía, pero también entendí que no soy quién para privarte de tus placeres sexuales, y se me ocurrió una idea.

Tu padre tiene que irse por trabajo a Madrid, me había dicho que de no ser por ti y tu colegio, le hubiera gustado que lo acompañara, y entonces se me ocurrió, que tú podrías ir con tu tía Ruth hasta que regresemos. ¿Y cuando es eso? dije, Para las fiestas a fin de año. Son 8 meses más o menos. De paso a mí me va a venir bien, así me ayuda a olvidar este bochorno, contestó mamá.

Pero, es mucho tiempo, los voy a extrañar...

Llamaremos todos los días y además hay otra cosa.., tu tia Ruth cree en las nalgadas como forma de castigo. Ella les dio nalgadas a sus hijos hasta los 15 años.

GUAU!.... Mamá..., piensas en todo....

Pero tienes que ser inteligente, no tiene que darse cuenta que a ti te gusta, porque quizás no te castigue de esa manera...

Esta mañana hablé con tu padre, y él está de acuerdo, y luego hablé con tu tía Ruth, y dijo que no había problema... pero me dijo que aceptaba si yo le daba permiso para disciplinarte como ella lo considera, dije que sí, que si bien yo no creía en las nalgadas, tú estarías con ella y tendrías que aceptar sus reglas...

De diez...! Mamá...

Con tu padre nos iremos este sábado a la mañana, antes te dejaremos con la tía Ruth, tienes 4 días para preparar tus cosas, y en esos días en tu culo no va a ver rastros de la paliza que te día ayer.

Pasaron 4 días mi culo estaba recuperado, hoy me iría a vivir con mi tía Ruth...

Mis padres me dejaron en su casa con ella, me sirvió el desayuno y entonces me dio a entender las reglas, ella dijo que cuando no me comportara me daría azotes... pero tía le dije tengo casi 14 años... no importa... yo a mis hijos le di hasta que tuvieron 15.

Pasaron 3 meses yo no quise despertar sospechas me comporté correctamente, después de 3 meses de comportarme bien , ahora tenía ganas de que mi tía me diese nalgadas y, ella ya estaba acostumbraba a dar nalgadas, se la dio a sus hijos, hasta los 15.

Un sábado me quede hasta tarde a jugar al fútbol, habíamos quedados las 13:00 como horario para comer, pero yo llegue 13:45, al llegar mi tía estaba furiosa, 45 minutos tarde, pero jugamos desempate, tía dije.., no me importa el desempate, ahora tengo que calentar la comida, pero antes tengo que calentar otra cosa, y me mira... yo ya sabía lo que venía...

Ella saca una silla de la mesa y se sienta y me hace indicaciones de venir...yo voy...

Recuéstate sobre mi regazo...

Yo pensé, no me hace bajar los pantalones... estaba un poco desilusionado... yo quería una azotaina con el culito al aire...

Yo me pongo sobre su regazo y apoyo las manos en el suelo... entonces ella agarra al mismo tiempo los elásticos de mis pantalones blancos y mis calzoncillos... y me dice que me levante un poco.. yo me hago el asombrado, ¿Qué Tía ? Yo las nalgadas las doy con el culo al aire, no importa que tengas 14 años..., pero tengo 14... dije, dale no me hagas perder tiempo... entonces levanté un poco mi cintura y ella bajo al mismo tiempo mi pantalones cortos blancos y calzoncillos.... Y lo pone más allá de las rodillas , luego levanta un poco la camiseta y me acomoda para un ángulo óptimo de sus nalgadas..

Que culito tienes, bien carnoso, ideal para unas buenas nalgadas... Me haces poner colorado .. tía... dije.. (pero interiormente estaba súper-excitado... volver a recibir nalgadas después de 3 meses y con el culito al aire como quería...)

Ella entonces empezó a pegar, lentamente pero fuerte, luego acelero un poco, luego volvió a estar lenta.. SPANK... SPANK... Ay.. AY.. por 20 minutos me pego muy duramente y me dejo el culo bien, bien rojo... ,, después dijo como tengo que calentar la comida que bueno una buena dosis de cuchara de madera..No tía.. no no ..(pero en realidad estaba contento a pesar del dolor de mi culo) Levántate... dijo

Yo me levante mirándome el culo bien rojo... entonces ella me agarra de una oreja y me hace ir a la cocina, yo caminaba dificultosamente con mis pantalones y calzoncillos casi por el suelo y hace que la acompáñe a la cocina,, llegamos saca una silla me hace inclinar sobre el respaldo poniendo las manos en asiento, vuelve a levantar mi camiseta y agarra la gran cuchara de madera que está colgada en la pared y empieza ... SMACK... SMACK... SMACK... AY, AY, AY... después de 50 buenos cucharetazos en cada nalga para , dijo .. ahora ponte en el rincón con las manos arriba de la cabeza y la nariz pegada a la pared...yo me levanto y agarro mi nalgas bien azotadas y me voy para el rincón... , ya en el rincón ella se me acerca, me levanta la camiseta para que se me viera todo el culo y me da 2 palmadas fuertes en cada nalga y dijo... quédate en esa posición hasta que se caliente la comida.....

Mientras se calentaba la comida, cada tanto me elogiaba mi culo... ¡Que culito, tienes! ¡ Qué lástima que esté tan rojo...!

Me vas a pasar crema suavizante, yo le digo. No yo prefiero no pegar tan duro pero que conserves el dolor, para que aprendas... ¿No tan duro? Le dije....

Se me vuelve a acercar y me da otras 4 palmadas en cada nalga...Me levanta los pantalones vistiéndome... y dice cállate y ve a comer...

AYY... dije cuando me senté., ¿Duele el culo? Dijo, sí, tía. Bueno eso es parte de la lección, que siga doliendo por un tiempo.

Terminé de comer, fui al baño, luego a mi habitación y mire mi culo en el espejo bien rojo con algunas marcas violetas.. y estaba muy dolorido... A la noche... más aliviado, me volví a mirar el culo en el espejo y me hice una buena paja recordando tan magnífico acontecimiento.

Fue una maravillosa azotaina, pero tendría miedo de repetirlo a menudo, no quisiera que se diera cuenta, esperaría por lo menos dos semanas, pero no más, quiera volver a ser castigado por mi tía y que me volviera a dejar el culo bien... bien.... rojo.


Con 9 años, me pega una vecina y mi mamá

Paula , tiene 12 años, va de camino a su casa, cuando está a una calle de casa, ve salir a un chico como de unos 9 años, con una bata del cole blanca, al verlo cerrar la puerta, queda impactada al ver su pequeño culo sobresalir de su bata blanca, pareciera como que el chico estuviera desnudo bajo su bata.

Hola, Paula le dice: Vas para la escuela?

Si, responde la niña, pero la verdad no tengo ganas de ir hoy.

Porqué?

La maestra va a tomar lección y yo no estudié mucho....

Mira, yo vivo a una calle de aquí, mis padres trabajan y no llegan hasta tarde, si tus padres no se dan cuenta, te puedes quedar conmigo.

Vale !!!. La maestra tomará lección , no una prueba escrita, y mis padres no tienen por qué enterarse de mi ausencia.

Y que hay con los deberes...

Tengo un amigo al que iré y le pediré los deberes.

¿Como te llamas y cuántos años tienes ?

Adrián y tengo 9 años, estoy en 3º de Primaria.

Yo, me llamo Paula  y tengo 12 años, voy a 1º año de la secundaria, pero hoy tenemos desinfección.

Adrián estaba contento de compartir la tarde con un chico mayor, de 12 años que iba a la secundaria, se sentía halagado que lo haya escogido para pasar la tarde.

Bueno, ven a mi casa, lo pasaremos bien, que raro que viviendo a una calle no te haya visto antes.

Es que me mudé hace poco, este es mi primer año en el barrio, respondió Adrián.

Adrián es un chico blanco y apuesto de pelo oscuro, un poco bajo para su edad. Paula tiene la piel un poco más oscura, pero es igual de apuesta, más alta que las otras niñas de su edad, los dos parecen como atraerse. Adrián al sentir que un chico más grande le dio importancia y Paula al quedar impactada por el culito del chico.

Llegaron a la casa, ven pasa Adrián, ponte cómodo, sácate la bata

Gracias...

Adrián se la quita y la pone sobre una silla. Esta vestido con una camiseta blanca y pantalones cortos blancos.

Sabés, le dice Paula, parecía que no llevabas nada bajo la bata del cole, de la manera como se te notaba el culito.

No, llevaba un pantalón corto, dice Adrián sonriendo y un poco sonrojado.

Quieres tomar o comer algo?

Ahora no, luego sí. Respondió Adrián.

Sabés, si mis padres se enteraban de que yo había hecho campana, seguro que me hubieran dado unas buenas nalgadas y con el culo al aire. A ti te dan nalgadas ?

No, solo una nalgada muy de vez en cuando, pero sobre los pantalones.

Tú has hecho campana, has faltado al colegio sin autorización de tus padres y te mereces unas buenas nalgadas en tu culito al aire, dice Paula ... un poco en broma, pero también esperando la respuesta de Adrián....

Adrián responde sonriendo, si tú me las quieres dar, estoy dispuesto....

Pula se sorprendió. ¿Hablas en serio Adrián?

Mirá, no sé, a veces cuando mis amigos hablan sobre las nalgadas que sus padres le dan, me hace sentir un poco de curiosidad, no sé ...

Quieres probar ?

Adrián piensa por un momento y dice ... Bueno, vale... como va a ser ?

Mira, para probar tiene que ser una paliza de verdad, si no, no sirve, te pones sobre mi regazo, te bajo los pantalones y calzoncillos y te pego con la mano en tu culito hasta que quede bien... bien rojo....y empieces a llorar...

Hummm..... no sé, pero lo que me dices, me hace sentir vergüenza. De que me veas la tita, (pene).

Entonces ?

Si, Paula, he sido un chico malo, falté a la escuela sin autorización y merezco unos buenos azotes en el culo hasta que me quede bien rojo...

Paula no lo podía creer, pronto vería esa culito que lo había impactado tanto, y no sólo eso, le daría unas buenas nalgadas hasta dejársela muy... muy rojo.

Bien Adrián, prepárate, ven aquí, mientras agarra una silla y se sienta.

Si, Paula...

Adrián obedece...

Ahora inclínate sobre mi regazo.

Adrián se inclina, entonces Paula  agarra el elástico de los pantalones cortos y los baja hasta pasar la rodilla, luego hace lo mismo con los calzoncillos, los baja y los une con los pantalones, luego levanta un poco la camiseta blanca hasta que queda el pequeño culo completamente expuesto.

¡¡¡¡ QUE CULITO QUE TIENES!!! NO ME HABÍA EQUIVOCADO CUANDO LA VI TAPADO POR LA BATA DEL COLE, AHORA ESTÁ COMPLETAMENTE AL AIRE, ESPERANDO POR UNA MERECIDA PALIZA !!!

Adrián, que está inclinado sobre el regazo, con las manos tocando el sueli y mirando al suelo dijo: ¿PABLO, ME VA A DOLER?.

Antes de darle una respuesta, Paula , empieza a acariciar y masajear el culito, está deslumbrado ante tanta belleza. Acaricia, masajea, separa las nalgas, observa el orificio anal: rosadito, hermoso, vuelve a masajear, acariciar y entonces dice: Sí, va a doler. ¿Estás listo? :

Sí, empieza.

SPANK... AYYYY. SPANK... AYYY.... SPANK... AY.... SPANK... SPANK... AY......

Paula pega por todo el pequeño culo de Adrián que va tomando color rojo, el empieza pegando fuerte, pero lentamente , luego va adquiriendo más velocidad, pega cada vez más fuerte y más rápido, no dejando ningún centímetro cuadrado del culito sin azotar....

Adrián está empieza a sentir mucho dolor y empieza a llorar, pero Paula dijo que sería una paliza real, y sigue pegando....

SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY... SNIFF... SNIFF...

El culito de Adrián está de color rojo intenso y brillante, entonces Paula dice: son las últimas 50 nalgadas y van a ser muy fuertes... Quiero que cuentes y digas ... 1... gracias por pegarme en el culito, Paula...así hasta las 50.

Sí Paula, responde Adrian llorando..... SNIF... SNIF...

SPANK..... AYY....

1... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo... Dice Adrián...

...............................................................................................................

SPANK.... AYY...

48 .... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo...

SPANK.... AYY...

49 .... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo...

Y

SPAAANNNNKKKK.... AAYYYYYYYY....

50... Gracias Paula por pegarme en el culito, Pablo.......

Bueno, está bien Adrián ya terminamos... dice Paula dándole unos pequeños golpecitos finales en el culito a Adrián que está más rojo que un tomate y más ardiente que el fuego.

Paula le dice que descanse un poco en su regazo, mientras contempla su obra, acariciando y masajeando suavemente su culito.

Luego de 5 minutos, le dice a Adrián que se levante, él lo hace, frotándose sus nalgas bien azotadas y dando saltitos.

Espérame, dice Paula....

Paula vuelve con una crema suavizante y dice ponte nuevamente sobre mi regazo, entonces Paula pasa la crema por todo el culito de Adrián 

AHHHHH.... Responde Adrián aliviado... que bien se siente...

Paula sigue pasando, masajeando y acariciando no solo las nalgas, también el orificio anal.

¿Qué te pareció. Adri? dice Paula

Dolió mucho, pero me gustó....

Ya vi... como se te paraba tu pequeña tita (pene) dice Paula sonriéndose...

Pasaron la tarde jugando a la videoconsola, hasta que llegó la hora de volver a casa y fingir que había ido al cole.

Se despidieron no pudiendo los dos creer lo que había pasado esa maravillosa tarde:

Paula, al quedar impactada con el culito que sobresalía del chico, lo invita a su casa, hace que se incline en su regazo, y en su hermoso culito al aire, le da nalgadas hasta dejárselo muy...muy... rojo.

Para Adrián había sido un experiencia intensa y alucinante, en vez de pasar al frente en la escuela, había recibido duras nalgadas en su culito desnudo por primera vez.

Pasaron cuatro días y la mamá de Adrián se enteró que no había ido a clase : Le preguntó furiosa, Donde Estuviste ? En la Fábrica Abandonada, respondió Adrián.

Cómo en la Fábrica Abandonada ? . Estás loco ? No sabes los peligros que hay para un chico de 9 años, pasarse toda la tarde en ese lugar. Tenés suerte que no te pasó nada....

Entonces pasó algo que Adrián no esperaba, su mamá, lo tomó de una oreja, se sentó y puso a Adrián sobre su regazo y le bajo los pantalones y calzoncillos, para su suerte el culito de Adrián estaba blanco como la espuma, pero no por mucho tiempo, su mamá le dio sus primeras nalgadas fuertes en su culito desnudo, después de 20 minutos de intenso castigo con la mano, su culito quedó más rojo que un tomate y el llorando como un bebé.

Ahora sabía que tenía que ser cuidadoso en sus futuros encuentros con Paula, no por las nalgadas que le podía dar su mamá, sino para que no se estropear esa hermosa relación que empezaron a tener juntos.

Con 13 años, mi mamá me pega por primera vez y tenga una descarga sobre su falda. - Parte 2


El verano terminó, me despedí de Don Romero muy afectuosamente, pidiéndole disculpas por el incidente del robo. Él me dijo que ya había pasado y que había aprendido la lección y que el próximo verano me volvería a contratar si yo quería. Sí, le dije, por supuesto.

Volviendo a mi casa, recordaba la fabulosa nalgada que me había dado con la mano y el cinturón, y estaba inquieto, quería volver a repetir esa magnífica experiencia, pero no sabía cómo.

Llegué a mi casa, salude a mi mamá y me fui a mi cuarto para esperar la cena. Sentía un hormigueo, estando en mi cama y pensé: el verano pasado había recibido 2 hermosas y salvajes nalgadas de mis niñeras Gutiérrez y Garcia, y las pocas nalgadas de mi mamá que había prometido disciplinarme si fuera necesario. Había pasado ya un año y no hubo razón, yo había tenido vergüenza de enseñarle el culo a mi mamá a los 12 años, pero al darme esas nalgadas delante de la niñera García, me había empezado a gustar. Ella prometió darme una dura sesión de azotes si no me comportaba bien, y yo me había comenzado a excitar. Entonces urdí un plan: haría como a Don Romero, le robaría dinero de su monedero y así recibiría una paliza de novela.

Pasaron 2 semanas y entonces entré a su habitación, agarré su cartera y saque un billete de 5000 pesetas, saliendo deje caer un frasco de perfume a propósito, para hacer ruido y que viniera enseguida. Ella vino dijo – Que hacés aquí,  Adrián? Que pasó?

Yo me quedé mudo y ella vino hacia mí y noto una pequeña parte de un billete que sobresalía de mi bolsillo, Y puso la mano en el bolsillo y sacó el billete.

¿Qué es esto Adrián?

Nada, mamá, quería comprarme un videojuego...

Ahora me robas el dinero...

No podías haberme pedido el dinero.

Pero, dijiste que  no tenías dinero...

Y entonces, robaste....

Perdoname, ma....

Ella me miró enfadada y dijo: Te acuerdas del año pasado, cuando las niñeras te dieron una buena paliza, luego te comportaste bien....

Si, mamá

Y yo había prometido darte la paliza que nunca te di cuando eras pequeño, si no te comportabas

Si, mamá.

Bueno, ese dia ha llegado, prepárate para la paliza de tu vida.

Pero, mamá, tengo 13 años, 1 más que el año pasado, no te parece que estoy grande para que me des un azote.

Tendría que habértelas dado desde pequeño, así aprendías.

Bueno, primero, ves a por la escoba y el recogedor y limpia el suelo y tira ese frasco de perfume.

Si, mamá.

Hice lo que me dijo, y entonces llegó el momento.

Vamos al comedor, que tenemos más lugar.

Si, mamá.

Ya en comedor ella, agarró una silla de la mesa del comedor y se sentó.

Ven hacia mí, ella hizo señas con la mano.

Yo fui y me paré frente de ella.

Ahora bájate los pantalones e inclínate sobre mis rodillas.

Yo me desbroché el cinturón y me bajé los pantalones quedándome en calzoncillos blancos y me incliné sobre su regazo.

Entonces el gran momento llegó, ella tomo la cintura de mis calzoncillos y procedió a bajármelos y juntarlos con los pantalones cerca de mis tobillos, luego levantó un poco mi camiseta azul, dejando todo mi culo al desnudo.

Te parece mamá, que te esté mostrando el culo a los 13 años!!! Le dije (excitado por dentro al mostrárselo)

Tienes un hermoso culito.... No la había visto blanca desde que tenias 7 añitos.

Si la última vez estaba super roja por las nalgadas de García.

Y va volver a quedar, igual o más de roja, lo prometo.

¿Nunca me hiciste pegaste en el culo?, no, salvo esas nalgadas de hace un año, no?

No, prepárate, y empezó

AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE.

Ay,Ay,

Yo no lo podía creer, mi primera zurra en el culo, por mi mamá, y había empezado realmente fuerte , nalga por nalga y por el centro de mi culo, mi mamá.. pegaba bien fuerte... yo me sentía de primera.

No tan fuerte, mamá,, ay ay ay AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE...

Para que aprendas a no robar ... AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,  AY.. AY.. AY...

Por favor, mami me duele el culo... y ella siguió AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE, ....

La puta, sí que dolía, no sé cómo, mi mamá parecía una experta, inconscientemente, agarré su mano, pero ella la soltó siguió pegando por todo mi culito AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE, ...

Pasaron 20 minutos de intensas nalgadas, mi culo estaba bien rojo , entonces se detuvo.

Levantate. Dijo..

Yo lo hice cogiendo mis nalgas bien azotadas y mirándome el culo....

Que rojo que me lo dejaste, mamá...

Y eso es solo el comienzo

¿Qué? Dije

Sí, para que aprendas, el castigo tiene que ser muy fuerte...

Que sigue ahora... mamá le dije, mientras seguía frotándome el culo.

La señora Garcia me obsequió un tawse, para que lo usara en los momentos adecuados. Te acuerdas del tawse? Tú ya lo probaste.

Si, mamá, duele come el infierno...

Ve a tu habitación y esperame.. No.. mamá por favor...

Fui agarrándome el culo a mi habitación y esperé y entonces llegó mi mamá con esa especie de látigo cortado en dos golpeándolo en la mano.

Me dijo que saque la almohada y la ponga en el medio, y que me acueste levantando mi culo.

Si, mama, lo hice.

Ahora estaba expuesto con el culo rojo a la espera del siniestro tawse aterrizar sobre las nalgas.

Y empezó AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE,AZOTE, AZOTE, AZOTE, AZOTE, .. AY, AY, EL DOLOR ERA IMPRESIONATE,

No, mamá, no, por favor.

Tienes que aprender la lección, Adrián 

CRASH CRASH ... AY. AY... MI CULO ESTABA EN EL INFIERNO, ROJO ARDIENDO EN LLAMAS

CRASH CRASH CRASH CRASH CHASH... Yo no aguanté más y empecé a llorar sniff sniff no mamá no por favor....

Serán 200 azotes con el Tawse...

Y quiero que digas llegando a los 180....

180, Gracias mamá por darme una azotaina en el culo al aire y así hasta los 200.

Por cuantas vamos, dije yo envuelto en lágrimas

140, me respondió mamá. 

Lloré. Lloré y lloré y entonces llego..

CRASH...

180... Gracias mamá por darme una azotaina en el culo al aire...

.....

CRASH...

198... Gracias mamá por darme una azotaina en el culo al aire...

CRASH...

199... Gracias mamá por darme una azotaina en el culo al aire...

Y..... CRASH....

200... Gracias mamá por darme una azotaina en el culo al aire...

Y terminó, entonces mamá fue y volvió con un frasco de crema suavizante,

Y dijo sigue recostado, que te paso crema en tu culito... bebé...

Yo estaba muerto de dolor, pero excitadísimo, más ahora que mamá me iba a pasar crema

SANA SANA CULITA DE RANA, SI NO SANARÁ HOY.. SANARÁ MAÑANA

Y PASÓ CREMA POR TODO MI CULO AY... COMO SE SENTÍA QUE PLACER !!!

Después de 5 minutos ella dijo... espero que hayas aprendido la lección..

Si, mamá...

O quieres 10 minutos adicionales con la mano....

No, mamá, por favor...

Si, van a ver 10 minutos adicionales con mano...

No mamá, por favor...

Crees que soy idiota, tu hiciste todo a propósito para te pegue... te excita ¿no?

Yo me quedé mudo...

Si yo no me habría dado cuenta antes, tu crees que te hubiera pegado 200 golpes con ese instrumento?

Entonces? dije

La primera vez con la niñera Gutiérrez, creía que lo merecías, pero la segunda con la García, me di cuenta que lo hacías a propósito, tu nunca te comportas mal...

Yo escuchaba asombrado y avergonzado....

Desde ese momento esperaba darte una paliza, pero como no te comportaste mal pensé que se te había pasado, pero Don Romero me contó lo del robo y que te dio un buen castigo....

Y presentía que ibas a tramar algo este año, además tu robo fue muy torpe... dejar caer un perfume.. dejar a la vista el dinero...

Yo estaba todo colorado, casi como mi culo.

Ven, acomódate en mi regazo, que mientras te doy 10 minutos adicionales te explico lo que haremos a partir de ahora.

Mi mama se sentó en mi cama y yo me acomodé en su regazo...

Y empezó AZOTE, AZOTE.. ... TE PARECE NORMAL QUE A UN CHICO DE 13 AÑOS LE GUSTE QUE SU MAMÁ LE HAGA PAM-PAM EN EL CULO AL AIRE?

NO, MAMA, YO ESTABA AVERGONZADO, PERO TAMBIEN EXCITADO... AZOTE, AZOTE... Y ENTONCES DIJE.. SI, MAMA, ME ENCANTA MOSTRARTE EL CULO Y QUE ME PEGUES BIEN FUERTE, ELLA ENTONCES EMPEZÓ A PEGAR CON LA VELOCIDAD DE UNA AMETRALLADORA...AZOTE, AZOTE. YO YA NO PUEDE AGUANTAR MÁS Y, EYACULÉ Y LE LLENÉ DE LECHE SU FALDA AL TIEMPO QUE ELLA PEGABA CON MAS Y MAS FEROCIDAD...

Entonces paró... dijo levántate, ya terminó.

Me levanté, mientras me frotaba mi culo super-castigado.

Mejor hablamos a la noche, yo ahora me tengo que limpiar y tu tienes que reponerte de la paliza.

Llegó la noche, ella toco me habitación, puedo pasar, dijo...

Se sentó al costado de la cama y dijo, : Voy a tratar de intentar sacar ese placer que tienes, por los próximos 3 meses una vez a la semana, yo te daré muy fuertes nalgadas a ver si se te va, estás de acuerdo?

Si, mamá.

Tu que prefieres con o sin el culo al aire?

y..... con el culo al aire..

Bien....te advierto que serán muy duras... con la mano.. primero y después probaremos varios instrumentos... como la paleta.. la cuchara.. el cinturón y limpiador de alfombras...

Y eso que es mamá?

Es algo de madera , ya no se usa más ,.pero duele mucho en el culo.

Bueno...

Mamá...

Si..

La verdad, no te gustó también pegarme en el culito.

ERES TERRIBLE...

Lo que empezó como una lección, me terminó por gustar...

Entonces, porque esperar una semana.... Antes de dormir, porque no me hacés pam-pam ahora..

Pero, no te duele todavía...

Despacito....

Pero...

Una vez por semana, nalgadas duras, pero todos lo días antes de dormir unos buenos azotes suavecitos, pero en el culo al aire no, mamá?

Vale, y sacó la silla de mi escritorio.

Me levanté de la cama , fui hasta ella y dijo... tumbate sobre mi falda ...

Ella bajó de una sola vez mi pantalón pijama y mis calzoncillos y quede nuevamente con el culito al aire...

Mi mamá dijo, está bastante mejor, pero todavía está rojo...

jajaja... me reí un poco

Y empezó SPANK SPANK SPANK SPANK,

No me haces daño, le dije a mi mamá, en tono de burla.

Dijiste que fuese floja...

Más fuerte mami...

No, no quiero que me vuelas a acabar en la ropa, cochino...

No, Mamá...

Las últimas 4.

Si, mamá..

SPANK SPANK SPANK.. SPANK., Y ME DA UNA PALMADITA Y DICE ANDA A ACOSTARTE.

Mamá, pégame con la cuchara hasta que me descargue y me vaya a dormir...

Ya sé, si no jugarás con tu tita en cuándome vaya... no?

Bueno, ahora vuelvo...

Vino con una cuchara y una toalla...

Ponte con el culete en pompa y pon esta toalla debajo de tus...

Si... ya se...

Te voy a dar con la cuchara hasta que te descargués ...

Si..mamá...

Me puse de rodillas sobre la cama, me baje el pantalón pijama y los calzoncillos, quedé con el culo al aire y en pompa y puse la toalla como dijo y entonces empezó....

SMACK.. AY.. SMACK.. AY...

Después de 60 buenos golpes de cuchara mi culo volvió a estar muy rojo y eyaculé...

Me sequé, mi mama me volvíó a pasar crema y dijo...

Eres terrible... como hacés para aguantar...

Conforme, ahora..

Si, mamá ,

anda ve a dormir ahora.

Me levanté los pantalones pijama y le di un beso despedida.

Me acosté en la cama, entonces, mi mamá apagó la luz y se fue.

No podía creer lo que había pasado, en ese día, todo fue muy intenso, muy excitante, muy caliente, habrán pasado uno o dos minutos y me quedé dormido. Fue un día grandioso, en el que me volví a sentir casi un bebé, al recibir de mi mamá varios azotes con el culito al aire.


Con 13 años, Don Romero me pega en el culo - Parte 1


Era junio de 1997, ya había cumplido 13 años, estaba de vacaciones y pensaba conseguir un trabajo de verano para poder comprarme videojuegos, ropa y salir con mis amigos.

Caminando encontré un anuncio en una ferretería que necesitaban un ayudante de 13 y 14 años, el dueño era Don Romero, un hombre grande y corpulento como de unos 45 años, a quien conocía desde pequeño.

Entré y saludé: Hola Don Romero, ¿cómo está?

Bien, ¿Que necesitas?

Vengo por el anuncio de ayudante.

¡Qué bien! , así que tienes ganas de trabajar

Si, ando con ganas de tener dinero para este verano y poderme comprar videojuegos.

Bueno, como te conozco de pequeño y conozco a tu mamá, creo que no me vas a fallar.

Por supuesto Don Romero, ¿Qué tengo que hacer?

Entonces el me explicó que tenía que ayudarlo en el negocio, ordenando estanterías, clasificando la mercadería, y que también tenía que hacer mandados y ayudarlo a atender el negocio entre otras cosas.

Si, con gusto, dije.

Acordamos la paga, el horario y cuando empezaría. Me dijo que como estábamos cerca de las fiestas, él se iba a tomar una semana de vacaciones, y volvería empezando el mes de julio, por lo tanto empezaría el 1 de julio a trabajar.

Quédese tranquilo Don Romero, el 1 de julio estaré aquí.

Al irme del negocio, de repente me doy vuelta para hacerle una pregunta, entonces noté que me había estado mirándome el culo, (en esa época llevábamos la camisa adentro del pantalón y no suelta como ahora, y al llevar puesto un tejano se notaba lo redondo y carnoso que era mi culo), me hice el tonto, le hice la pregunta, me respondió , nos volvimos a saludar y me fui.

Ya en mi casa le comuniqué a mis padres la noticia, y se pusieron contentos.

Así que ahora, vas a tener dinero , dijo mamá.

Sí, me voy a comprar un montón de videojuegos y de ropa.

Me parece muy bien, respondió

Entré en mi habitación, me empecé a acordar como el verano pasado había recibido nalgadas de las niñeras Gutiérrez y García y empecé a excitarme, me desabroché el pantalón y me hice una buena paja AHHHH AHHHHH Que Placer.... Mi culo desnudo recibiendo palmadas y volviéndose cada vez más rojo.... AHHH... AHHH.... AHHH... y entonces OH... SORPRESA !!!, sucedió ..., al acabar, me saltó un chorro de líquido blanco espeso era.... semen: había tenido mi primer orgasmo húmedo.

Ahora podría ser padre, dije riéndome; no me olvido de ese día , fue el 25 de junio de 1997, tenía 13 años.

Discretamente, fui a buscar papel higiénico y limpie el charco de semen que había en el suelo, luego me tiré en la cama y pensé en Don Romero: ¡Que tal, si el me daba nalgadas este verano!, sabía que le gustaba mi culo, y pensaba que seguro le gustaría tenerme recostado entre sus rodillas y dejarme el culito bien rojo.

Pasó la semana, por fin llegó julio....

Lunes 1 de julio de 1997, puntualmente voy a la Ferretería de Don Romero.

Hola, Don Romero, ¡Buenos días!

¡Buenos días! Adrián, listo para comenzar a trabajar.

Listo, Que tengo que hacer.

Me enseño a clasificar mercadería, luego me dio para hacer mandados, lo ayude a atender el negocio. Terminamos el día, muy contentos. Él dijo que estaba muy conforme conmigo.

Llegando a mi casa, me di cuenta que no lo podía desilusionar enseguida, esperaría al menos un tiempo, un mes, quizás, en hacer algo que mereciera ser castigado.

Pasó Julio, Don Romero estaba encantado conmigo, incluso lo había pescado otra vez mirándome el culo, jaja.., de nuevo me hice el tonto, y pensé : Pronto voy a estar sobre tus rodillas y me dará una azotaina en mi culo desnudo.

Por fin, llegó ese día. Miércoles 5 de agosto. Don Romero, fue por un momento a su casa, por una puerta trasera del negocio, entonces yo abro la caja registradora y saco 200 €,-, El vuelve de repente y me pesca infraganti.

¿Qué estás haciendo?

Me quedé mudo.

Eres un ladrón, yo confiaba tanto en ti y me has defraudado. Acaso, no te pago bien? en el día que te corresponde ? te traté como a un hijo? Y tú así me pagas?

Perdóneme, Don Romero...

Para qué ¿Dime para qué querías el dinero?

No supe que decirle

Seguro para comprarte cosas que no necesitas y aparentar con tus amigos.

Disculpe Don Romero, no va a volver a pasar.

Bueno, estás despedido, coge tus cosas y vete.

No, Don Romero, no me eche, por favor

Que quieres que haga? Que tenga a un ladrón?

Deme otra oportunidad, castígueme

Castigarte, Cómo?

No sé, quizás, dándome una buena azotaina 

Se quedó pensando

Pégueme muy fuerte, así aprendo una buena lección, que me hará sentir mejor, y prometo no volver a defraudarlo.

Está bien, dijo, por esta vez, pero la próxima vez te echo.

Gracias.

Voy a cerrar el negocio y te voy a dar un buen y merecido castigo.

—Estaba súper contento y excitado, después de un difícil momento, había conseguido lo que quería, ser castigado por Don Romero muy duramente—

El cerró el negocio y bajo las cortinas para que nadie viera, luego encendió algunas luces.

Me miro y dijo:

Te voy a dar unos buenos azotes en el culo, primero con la mano y luego con el cinturón ¿De Acuerdo?

Si, Don Romero, lo merezco.

Entonces agarró una silla, se sienta y dice:

Ven, ponte enfrente de mis rodillas

Yo obedezco.

Ahora bájate los pantalones

Sí, Don Romero

Me bajo los pantalones y le pregunto ¿Los calzoncillos también?

Él duda y dice: Inclínate sobre mis rodillas

Yo me inclino sobre sus rodillas, mirando y apoyando las manos en suelo, entonces él toma la cintura de mis calzoncillos y los empieza a bajar. Levanto un poco el culo para ayudarlo a bajarlos completamente, luego el levanta un poco mi camisa, dejando expuesto todo mi culo.

—Me había salido con la mía, estaba sobre las rodillas de Don Romero, con el culo al aire, esperando tener una buena sesión de nalgadas.—

Quieres que te diga, Algo?

Sí, Don Romero

Tienes un muy lindo culo: blanco, redondo, carnoso y... suave, lástima que va a quedar muy rojo.... , luego me lo acaricia y me da dos palmaditas.

Gracias, y déjemelo bien rojo, lo merezco.

Así, será y empezó:

SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY...

Él empezó pegándome con su pesada mano lentamente, pero muy fuerte en cada nalga y centro de mi culo.

Luego fue aumentando la intensidad....

SPANK SPANK SPANK SPANK SPANK SPANK... AY AY AY...

Duele?

Sí, mucho.

Por supuesto, vas a aprender la lección

SPANK SPANK SPANK SPANK SPANK SPANK SPANK... AY AY AY...

Él siguió aumentando la intensidad y siguió calentando mis nalgas que se ponían cada vez más y más rojos.

De repente empezó a descargar palmadas con la velocidad de una ametralladora

SPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANKSPANK

Mi dolor aumentó y empecé a llorar WAAH.. WAAH... SNIF.. SNIF... AY... AY...

Él siguió pegándome, dura y rápidamente con su mano pesada y grande, mis nalgas ardían de dolor, pero también sentía una excitación inmensa, mi tita (pene) se empezó a poner dura.

Entonces, paró y me empezó acariciar las nalgas

Tienes el culo bien... bien... coloradito, es una hermosa manzanita...

Levántate y acompáñame al espejo...

Me levanto, froto mis nalgas ardientes y me miro en el espejo

Que te parece ?

GUAU!!! que rojo, dije.

Anda al rincón por 20 minutos que ahora viene el cinturón...

Obedecí

Levántate la camisa y ajústala, así exhibes todo tu culo, luego ponte las manos sobre la cabeza y la nariz sobre la pared. Y quédate hasta que yo te diga.

Sí, Don Romero.

Sabía que Don Romero se sentó y miró mi culo deleitándose y excitándose. Yo también hacía lo mismo mostrándoselo, a pesar de mi dolor, mi tita estaba parada como un mástil.

Pasaron los 20 minutos exhibiendo mi culo en llamas, entonces me dijo que viniera y me inclinara sobre el respaldo de una silla y que apoyara las manos en el asiento de la misma.

Hice lo que dijo, él se sacó su grueso cinturón, lo dobló y empezó el castigo:

SMACK!!! SMACK!!! El cinturón se estrella en mis nalgas...

SMACK!!! AY!!! Dolía como el infierno

Serán 200, Como lo que quisiste robarme....

Está bien... me lo merezco

SMACK!!! SMACK!!! SMACK!!! AY!!! AY!!! AY!!!

El dolor de cada lenguatada de cinturón era inmenso.

Mi culo se estaba llenando de marcas, y como mi culo ya estaba rojo muy oscuro, con las marcas del cinturón se ponía cada vez más de color azul violáceo.

Yo estaba llorando a mares... WAAH!!! SNIF!!! AY!!! WAAH!!! SNIF!!! AY!!!

Llegando a los 180 cinturonazos, dijo:

Quiero que a partir de ahora digas 180, Gracias Don Romero; 181, Gracias Don Romero y así hasta llegar a los 200. Así aprenderás la lección para no robar.

Ok Don Romero

180 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

181 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

182 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

183 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

.............................................................................

198 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

199 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

200 SMACK !!! AY !!! Gracias Don Romero

Has aprendido la lección Adrián?

Si.

Está bien, quiero que te levantes y vuelvas al rincón en la misma posición de antes y por otros 20 minutos

Me levanté, acaricié mis ardientes nalgas mientras lloraba.

Mi culo empezó siendo blanco como la espuma, después de las nalgadas a mano se puso rojo brillante, y con el cinturón quedo azul violáceo lleno de marcas.

Luego de mirarme el culo fijamente por 20 minutos Don Romero vino con una crema y me la paso por las nalgas... AHHH... Muchas Gracias....

El me siguió masajeando suavemente las nalgas mientras yo me excitaba cada vez más y mi tita se paraba .Notando que tenía la tita parada me dijo:

Puedes jugar con tu tita, mientras te paso crema, eso te ayudará a descargar tensiones

AHHHH!!!! Gracias Don Romero, y me empecé a pajear mientras él me pasaba crema masajeándome las nalgas.

Cada tanto me daba 2 nalgaditas suaves y yo me excitaba acelerando la paja, hasta que llegó la descarga, un inmenso chorro blanco de esperma que pegó en la pared y llegó hasta el suelo, mientras Don Romero me seguía acariciando las nalgas y pasando crema.

Oh, disculpe, Don Romero ...

No, por eso no te hagas problema, yo te lo permití, así te podías descargar bien.

Ahora voy por papel y lo limpio., mientras volvió a darme 2 nalgaditas suaves.

Volvió, secó la pared y el suelo y me dio papel para que me limpiara la tita.

Aprendiste, la lección, Adrián?

Si, Don Romero.

Dolió?

Si, como el infierno, pero lo merecía. Me hizo sentir mejor. Gracias.

Bueno, Vístete, nos vemos mañana

Me vestí, me dio un abrazo y un beso en la mejilla.

Nunca me iba a olvidar de ese miécoles 5 de julio de 1997, el verano pasado había recibido nalgadas de dos niñeras, pero esta vez fue un hombre corpulento y fuerte el que me las propinó, y que me dio permiso para hacerme una paja mientras me pasaba crema por las nalgas ¡¡¡ FUE TAN EXCITANTE!!!

Al llegar a mi casa mi mamá me preguntó:

Como te fue?

Hoy tuve un día muy duro, trabajé mucho, hice muchos trámites.

Ve a descansar hasta que esté la cena.

Entré a mi habitación, me bajé los pantalones y calzoncillos, me mire el culo en el espejo, estaba rojo, azul y violeta por las marcas. Me tiré en la cama, con el culo para arriba y me quedé profundamente dormido hasta que mi mamá me llamo para cenar. Había sido la tarde más excitante que había tenido y pensaba en repetirla pronto.


Con 12 años mi niñera me pega en el culo - Parte 2

Habían pasado 2 meses de la fantástica azotaina que me había dado la Señora Gutiérrez, cuando una mañana mi mamá me dijo que saldría a la noche con mi padre, y que llamaría nuevamente a la Sra.Gutiérrez para cuidarme, le respondí como la primera vez que tenía 12 años y que me sabía cuidar solo, pero dije que está bien, que no había problema (en realidad estaba feliz , no podía creer volver a ver de vuelta a la Sra. Gutiérrez, ya empezaba a pensar cómo conseguir otra alucinante zurra para esa noche).

Mi mamá llamo a la Sra. Gutiérrez, pero le respondió que esa noche estaba ocupada, le recomendó a otra niñera, la señora Carolina García, una niñera muy severa, más que ella, y adicta al spanking, mi mamá lo pensó y dijo que estaba bien, se comunicó con García y acordó venir a las 8 de la tarde.

Dieron las 8:00, llegó la señora García, una mujer rubia, alta e imponente, ella comunicó sus condiciones, entre ellas, que procedería a aplicar una muy buena zurra en el culo si yo me portaba mal, mi mamá me preguntó a mí, yo le dije que no había problema (era justo lo que estaría esperando, no era la Sra. Gutiérrez, pero era una mujer muy severa e imponente a que le mostraría con gusto mi culo, para otra inolvidable paliza).

Mis padres se despidieron y quede a solas con mi nueva niñera, me dijo que me quedara viendo televisión mientras preparaba la cena, yo me estaba aburriendo viendo tele, cuando cogí una pelota de fútbol y empecé a rebotarla, de repente se me escapó y dio contra una lámpara de luz haciéndola pedazos, al oír el ruido apareció la Sra. García furiosa y me preguntó qué había pasado, yo le explique y ella me respondió que si estaba loco jugar con una pelota en el comedor, que ella me había ordenado ver televisión y que por eso iba a ser castigado muy duramente, me dio una pala y escoba para recoger los pedazos de la lámpara y ponerlos en el cubo de la basura, yo obedecí.

Ella sacó una silla de la mesa del comedor, y se sentó, yo sabía lo que vendría, fui hasta donde estaba ella, me baje pantalones y calzoncillos (esa noche estaba con una camiseta roja y un pantalón corto azul) y me incliné sobre sus rodillas, enseñándole mi culo blanco y carnoso como había hecho antes con la Sra. Gutiérrez, ella dijo : se ve que sabías lo que vendría y levantó un poco mi camiseta roja para tener todo mi culo a la vista y dijo: te voy a dejar el culo más rojo que la camiseta.

Ella me acomodó y empezaron las nalgadas SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY..., ella pegaba más fuerte que la Sra. Gutiérrez, y eso que pegaba fuerte, SPANK.. SPANK... SPANK... AYY.-. AYY... AYY... sus golpes eran muy fuerte y rápidos, golpeó duramente por todo mi culo, arriba, abajo, centro, nalga derecha, nalga izquierda, todo mi culo era rojo como un tomate y dolía como el infierno, estaba vez empecé a llorar SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... AYY... AYYY... AYY... SNIF... SNIF... AYYY...

Después de más de 20 minutos, se detuvo, acarició mis nalgas y dijo que me levantase, yo obedecí, voltee mi cabeza y mire mis nalgas, tenía razón mi culo había quedado rojo como mi camiseta, froté mis nalgas con las dos manos y empecé a saltar por el dolor.

Ella dijo que esto solo era la primera parte, que ya estaba la comida, que me vistiera y luego vendría la segunda y la tercera parte. –¿Qué? Yo le respondí. Dijo que ella era muy severa y que habría dos partes, más.

Me vestí, cenamos, pasaron 2 horas, ella volvió a agarrar una silla, se sentó y me dijo me ponga de nuevo sobre sus rodillas, yo volví a estar con el culo al aire de nuevo, entonces ella agarró un cepillo de pelo de madera que había traído entre sus implementos, y empezó de nuevo con las nalgadas SMACK... SMACK... SMACK... SMACK... AYYY... AYYY... AYY. AYYY. Como dolía AYYY... AYYY... SMACK... SMACK... Al rato empecé a llorar como un bebé SNIF... SNIF... SNIFF. AYY... SMACK..., ya mi culo había pasado del rojo fuego y se parecía cada vez más al azul de mis pantalones caídos, ella no se detuvo SMACK... SMACK... AYY... AYY... SNIF... el suelo se había convertido en un mar de lágrimas pero ella seguía pegándome duramente con el cepillo... SMACK... SMACK... AY... AYY... AYY... SNIF... SNIF... SNIF...., después de 15 minutos de cepillo entonces se detuvo, acarició mis nalgas, espero un poco y me hizo levantar, yo de nuevo me mire el culo y el color se parecía más al azul de mis cortos que al rojo de mi camiseta, agarre mi culo con las manos y di saltos, esta vez mas altos y más rápidos, el dolor era inmenso...

Ella dijo que descansara mi culo por 10 minutos y que vendría la última parte, sería con un tawse . Yo pregunté –¿Qué era eso? Ella respondió: Una correa de cuero cortada en 2 partes que se usaba en las escuelas escocesas, generalmente en la mano pero ella lo haría en mi culo como se hacía en algunas escuelas.

Pasaron los 10 minutos, aunque un poco aliviado, mi culo seguía estando en el fuego, de dolor pero también de excitación, estaba por probar una correa de cuero, con 2 tiras separadas como si fuera un pequeño látigo. Me hizo indicaciones de inclinarme sobre la mesa de comedor, lo hice, mostrando mi culo azul violáceo, entonces el cuero del tawse pegó en culo CRACK... CRACK... CRACK...AYYYYYYYYY..... AYYYYYYYYYYYYY... AYYY... Dolía más que el infierno, CRACK... CRACK... CRACK... AYYYYYYYYY AYYYYYYYYYY AYYYYYYYYYYYYYYY Comencé de nuevo a llorar SNIFF.... SNIFF... CRACK... CRACK.,, AYYY... , Ella no se detuvo hasta los 50 golpes de tawse en mi culo, yo lloraba a mares, y tenía el culo marcado por los golpes, después de 2 minutos de descanso, ella me ordenó ponerme de pie, volví a mirarme el culo, esta vez de color azul más oscuro que mis pantalones y marcado, García me dijo que no me preocupara que las marcas iban a desaparecer, tardarían pero desaparecerían, yo lloraba al tiempo que agarraba mi culo, no tenía ni fuerzas para saltar esta vez, fue entonces cuando ella saco un frasco , me hizo inclinar de nuevo en sus rodillas, pero esta esta vez para ponerme crema en el culo masajeándome las nalgas y empezó a cantar: Sana, sana culito de rana, si no sana hoy, sanará mañana, la verdad me sorprendió esas palabras tan tiernas en una mujer tan severa, y me dijo, que la zurra fue muy dura, pero que lo tenía bien merecido, a lo que respondí, si, nana, tienes razón.

Me hizo levantar de sus rodillas y me dijo que fuese al rincón, con las manos en la cabeza, yo lo hice ella se acercó, me levantó un poca la camisa roja, me volvió a pasar crema y dijo que me quedará allí, que mis padres están a punto de volver y ella quería que me vieran, yo le dije que no, por favor, me daba vergüenza que mi mamá me viera el culo y la tita, no me había visto desnudo desde que me empecé a bañar solo... quizás una vez cuando tenía 7 años, pero después nunca más.

Ella insistió, me dijo ¿Si me la mostraste a mí, porque tienes vergüenza de que tu mamá te vea el vulo y la tita? No supe que responderle, no le podía responder que mostrársela a ella me calentaba.

Entonces, llegaron mis padres, mi papá se fue directo a su dormitorio, y la niñera llamó a mi mamá, ella entró al comedor y me miró el culo, y preguntó que pasó, García dijo que había desobedecido jugando con una pelota en el comedor y que había destrozado una lámpara, que el color que tenía mi culo así como las marcas iban a desaparecer que me había puesto crema suavizante y que le dejaba el frasco por si acaso lo necesitara. Mi mamá se acercó a mí, todavía en el rincón y me dió cinco fuertes nalgadas en mi culo desnudo por primera vez y dijo : Esto tenía que haberlo hecho desde que eras más chico y no te comportabas como corresponde y remató con otros dos fuertes azotes, anda vístete, despídete, vete a tu habitación y acuéstate. 
Yo me vestí y salude a la Sra. García, mi mamá le agradeció lo que hizo, diciendo que tanto ella como la Sra. Gutiérrez eran dos excelentes niñeras que la habían convencido del poder de la disciplina y que no dudaría en llamarlas para otra ocasión.

Llegué a mi dormitorio, súper excitadísimo, no podía creer la noche que había tenido, como la otra vez me bajo los pantalones y los calzoncillos frente al espejo, miro mi culo que estaba todavía de color azul y nuevamente me hice una súper-súper paja recordando todo lo pasado: bajarme los pantalones, mostrar el culo, la zurra con la mano, el cepillo de pelo y el terrible tawse, la pasada de crema y los azotes finales de mi mamá. AAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!!! QUE PLACER !!!!!!!!!!!!!!!!!! AHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!! , nuevamente tuve un orgasmo seco, esta vez, todavía mejor al que había tenido hace tres meses con la visita de la Sra. Gutiérrez. Fue mi más maravillosa noche, no le mostré mi culo a la Sra. Gutiérrez, como esperaba, pero si, a la Sra. García que era también severa y excitante, y al final mi mamá me vio el culo después de 5 años, al principio me dio vergüenza, pero después cuando me dio las nalgadas me empezó a gustar mostrarle de nuevo el culo, como cuando era pequeño. Seguro que desde ahora voy estar esperando repetir o superar esta maravillosa noche, tanto con la Sra. Gutiérrez como con la Sra. García, pero esta vez no voy a esperar 3 meses para volver a tener otra zurra, ahora que perdí la vergüenza de mostrarle el culo a mi mamá, seguro voy a portarme mal a propósito para que mi mamá me dé una buena azotaina como merezco y estoy seguro que la próxima vez no serán sólo unos pocos azotes.


Con 12 años mi niñera me pega en el culo - Parte 1


Hola, me llamo Adrián, cuando tenía 12 años en 1996, durante unas convivencias con mi clase de 1⁰ ESO, al bañarme junto a mis compañeros, me empezó a llamar la atención los hermosos y carnosos culos que ellos tenían, mirándome el mío, descubrí que era igual de carnoso como el de los demás chicos. 

Cuando regresé de los tres días de convivencias,  con el colegio, yo me deleitaba mirándomelo en el espejo de mi habitación o del baño, también empecé a tener la fantasía de aparecer desnudo en una revista mostrando mis nalgas.

Un día mis padres tenían que salir y decidieron contratar a una niñera, yo le dije que a los 12 años, ya era grande, pero ellos insistieron, contratándola. 

Eran las 8 de la tarde cuando llegó la niñera, la Señora Gutiérrez, una mujer corpulenta, mediana estatura y pelo negro. 

Mis padres me la presentaron, entonces ella hizo una pregunta: 

¿Si no se comporta bien, tengo permiso para disciplinarlo? 

Mi mamá dijo: ¿en qué consiste la disciplina?, en darle unas buena azotaina en el culo respondió la niñera, mi madre sonrió y me preguntó a mí: ¿Qué quieres: azotes o un día sin salir, ni ver televisión?, yo pensé y opté por los azotes. 

En verdad estaba sorprendido y caliente al mismo tiempo, era la oportunidad de no solo mostrar mis nalgas, sino de tener por primera vez un Una buena zurra y yo ya pensaba en conseguirlo sin que la niñera se diera cuenta que fuese a propósito.

Mis padres se fueron y me dejaron a solas con la Sra. Gutiérrez. Yo ya tenía un plan en mente, como ella me había dicho que no comiera nada antes de la cena, yo fui a la cocina, me dirigí al frasco de galletitas que había en el armario, lo manoteé y lo deje caer, se escuchó un fuerte ruido y se hizo pedazos. 

Ella llegó furiosa y dijo: No te dije que no podías comer antes de cena, ¿mira lo que hiciste?, tenía mucha hambre le respondí. 

Ella me miro enfadada, me dijo que recogiera las galletitas y el frasco roto y lo pusiera en el cubo de la basura. Yo agarré la escoba y obedecí, entonces me dijo: ¿Ya sabes lo que te espera?, No, ¿Qué?, Una buena azotaina en el culo y con el culo al aire. ¿Qué? le respondí y me empecé a quejar, pero al final dije: bueno, está bien, acepto el castigo. (En realidad era lo que quería: obtener unos azotes y desnudar mi culo. Estaba Súper Excitado)

Ella entonces agarró una silla de la cocina, se sentó y me hizo señas de ir hacia dónde estaba ella, yo fui a su lado y me dijo: Bájate los pantalones (estaba vestido de con una camiseta azul y un pantalón corto blanco) , procedí a bajarme los pantalones hasta las rodillas, entonces me miró y dijo: los calzoncillos también; me bajé mis calzoncillos blancos y los junté con mis cortos, tapé mi tita (pene) con las manos, ella retiró mis manos diciéndome que me inclinara sobre sus rodillas, yo lo hice apoyando la manos en el piso , ella me levantó un poco la camiseta para dejar expuesto todo mi culo y me acomodó para una posición óptima. NO LO PODÍA CREER MIS DESEOS SE HACÍAN REALIDAD, MOSTRAR MI BLANCO Y CARNOSO CULO, CON EL ADICIONAL DE UNAS BUENAS NALGADAS QUE SEGURO ME DEJARÍAN EL CULO MUY... MUY ROJO.

Entonces empezó la paliza: SPANK... SPANK... SPANK... SPANK... Ella pegó primero en el medio del culo, luego alternado cada nalga, y centro de mi culo SPANK... SPANK... SPANK... AY... AY... AY... yo respondía.

Al principio pegó lentamente, luego cada vez más rápido, pero siempre muy fuerte. No dejó milímetro cuadrado de mi culo sin azotar. SPANK... SPANK... SPANK... AYYY... AYYYY... AYYYY..., yo gritaba de dolor pero al mismo tiempo me excitaba mucho... Luego de 10 minutos de duras e intensas nalgadas se detuvo, y me dijo que me le levantara, me levanté , me di vuelta, me miré el culo, estaba rojo brillante , puse mis manos en mis nalgas y empecé a dar saltitos tratando de aliviar el dolor.

Ella entonces dijo, Falta la segunda parte, tu falta fue demasiado grave. ¿Qué, más todavía? le respondí. Si, más, entonces me ordenó que me inclinase sobre la mesa de la cocina, obedecí exhibiendo mi culo al aire rojo fuego. Agarró una cuchara de madera grande que estaba colgando sobre el mueble de la cocina (pensar las veces que mi mamá la usó para cocinar y ahora aterrizaría con fuerza en mi pobre culo) y empezó a golpear mis doloridas nalgas SMACK... SMACK... SMACK... AAAAYYYYYYYYYYY... AAAAAAAYYYYYY... AAAAYYYYYYYY... ¡Como picaba la cuchara! ¡Dolía como el infierno!!! , después de 40 golpes en cada nalga, ella se acercó y toco mis nalgas ardientes... dijo que es suficiente, que me levante y vaya al rincón por 30 minutos, con las manos arriba de la cabeza y la nariz en la pared, lo hice, me puse en el rincón como ella ordenó, ella se acercó, levantó un poco la camiseta y la sujetó, para que exhibiera todo mi culo, al tiempo que me dio con la mano 10 azotes para terminar.

¡¡¡ MI SUEÑO SE HABÍA HECHO REALIDAD!!! ESTABA MOSTRANDO MI CULO DESNUDO, MUY... MUY...ROJO, DESPUÉS DE UN UNA ZURRA, LA NIÑERA LO MIRABA. Después de los 30 minutos ella vino con una crema suavizante y la paso por todas mis nalgas ardientes al tiempo que mi tita se ponía tiesa AAAAHHHH!!! ¡¡¡Que Alivio y Que placer!!!! Ella pasó la crema dando masajes en mi culo por 1 o 2 minutos.

Me puse la ropa y cenamos, yo sentado sobre un almohadón, luego miramos tele. A la medianoche llegaron mis padres, la niñera le explicó el incidente a mi mamá, le dijo que me dio una azotaina y que podía ver si quisiera, yo me negué a mostrarle el culo a mi mamá, diciéndole que estaba bien, que me lo merecía, mi mamá estuvo de acuerdo. La señora Gutiérrez se fue, dejándole su tarjeta esperando volver. Yo saludé y me fui a mi habitación.

Cuando entré enbmi habitación me bajé los pantalones y calzoncillos, mirándome el culo (que estaba todavía muy rojo) en el espejo, me hice una súper paja recordando todo lo que había pasado, desde quedarme con el culo al aire, pasando por el spanking con la mano y con la cuchara hasta que me pasó la crema AAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!!!!!! QUE PLACER !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Al final tuve mi orgasmo seco, el mejor de toda mi corta vida.

Había tenido una experiencia inolvidable, gracias a la Señora Gutiérrez, una niñera que había conocido apenas unas horas atrás, que hizo que le mostrase el culo, dándome fuertes azotes con la mano y con la cuchara de madera, para finalizar pasándome crema en mis nalgas ardientes y desnudas. Todo eso en una sola noche. Desde esa noche, yo esperaba, que mis padres volvieran a salir de vuelta, para que la Señora Gutiérrez volviera y repetir esos momentos tan calientes y alucinantes.


sábado, 29 de enero de 2022

Adrián aún usa calzoncillos de niño pequeño

Era un cálido día de agosto y habían pasado 3 semanas desde mi 13⁰ cumpleaños. 
Adrián, pronto estaría comenzando su primer año en la escuela secundaria, lo que marcaría un cambio significativo en su vida. Con cada cumpleaños, cada hito y cada evento, Adrián esperaba y rezaba para que finalmente señalara el final de las nalgadas desnudas que eran el castigo elegido por sus padres para su niño travieso. 
El año pasado, cuando cumplió 12 años, realmente sintió que finalmente sería el fin de que lo sometieran a ese infantil castigo. 

Finalmente, era oficialmente un adolescente y realmente creía que tener los pantalones y la ropa interior bajados hasta los tobillos y ser arrastrado sobre el regazo de su madre o su padre finalmente sería cosa del pasado.

Durante años, tener el trasero al descubierto y recibir nalgadas en la rodilla fue prácticamente el castigo estándar para Adrián. Sin duda, se equilibró con castigos, acostarse temprano, pérdida de privilegios y otras medidas disciplinarias más políticamente correctas, pero nada tuvo un mayor impacto en él, tanto literal como figurativamente, que una azotaina con el culo al aire. 

Por esta razón, siguió siendo el método de disciplina preferido por sus padres, independientemente de su edad. No es que fuera un chico particularmente malo. Por el contrario, en realidad se portaba bastante bien, quizás debido a la firme pero justa disciplina de sus padres. 

Pero en ocasiones, como con la mayoría de los niños, superó los límites y sería responsable de sus acciones. La mayor parte del tiempo su comportamiento mostraba que a pesar de su avanzada edad, todavía era un niño muy travieso y parecía que solo un castigo apropiado para un niño travieso sería suficiente. Si bien Adrián quería argumentar que debería estar exento de los castigos infantiles, sus padres simplemente insistieron en que su comportamiento y no su edad cronológica dictarían cómo y cuándo sería castigado.

Fue una lección que aprendió muy bien en su fiesta de su 12⁰ cumpleaños. Sus padres habían accedido a invitar a algunos de sus amigos más cercanos a una pequeña fiesta. Adrián esperaba una fiesta más involucrada. Sintió que, dado que se estaba convirtiendo en un adolescente, su fiesta debería ser una verdadera explosión. Sus padres simplemente negaron con la cabeza cuando el pobre adolescente recién nombrado no pudo ver la ironía en él al anunciar que ahora era un adolescente y no debería ser tratado como un niño mientras al mismo tiempo se quejaba de que quería una fiesta más elaborada como cuando era un niño. Si fuera tan maduro como decía ser, habría apreciado más la reunión íntima con sus amigos que las fiestas exageradas con castillos hinchables que sus amigos tenían cuando estaban en primer grado. Un adolescente de verdad se habría sentido mortificado si sus padres sugirieran tal fiesta. Por supuesto, esa no era la clase de fiesta en la que Adrián estaba pensando, pero como la mayoría de los niños inmaduros, él realmente no sabía lo que quería y estaba pensando en una injusticia que simplemente no existía.

Con esta actitud gestando bajo la superficie, se sentó con 4 de sus amigos más cercanos en la terraza mientras abría los regalos que le habían traído. Toni, Marc, Iker y su mejor amigo Juan estaban reunidos a su alrededor mientras abría sus regalos uno por uno. Su madre estaba a un lado cortando su pastel de cumpleaños recién cantado. Toni, Marc e Iker tomaron el camino más fácil y simplemente le compraron tarjetas de regalo de Amazon. Juan era su mejor y más cercano amigo y queriendo mostrar algo de pensamiento en su regalo, en realidad había hablado con la madre de Adrián y recibió una sugerencia para un regalo que realmente quería. 

Cuando Adrián abrió la caja, era un videojuego que él realmente pidió a principios de verano, pero a pesar de este hecho, estaba decepcionado con el regalo. En la tontería que es la mente de un niño pequeño inmaduro, Adrián había asumido que sus padres le habrían comprado ese juego para su cumpleaños y cuando vio que Juan se lo había regalado a él, en realidad sintió que le habían estafado un regalo de cumpleaños. El niño tonto había pensado que si Juan recibía un regalo que esperaba que sus padres recibieran, se quedaría corto en regalos de cumpleaños. Fue pensar así lo que demostró que, a pesar de sus afirmaciones en contrario, Adrián realmente era solo un niño pequeño e inmaduro por dentro.

A medida que Adrián internalizaba su decepción, se le hizo difícil ocultar su desdén y dejó el juego a un lado sin siquiera darle las gracias a Juan.

Juan, más astuto que Adrián, se dio cuenta de esto y simplemente salió y preguntó: ¿Hay algún problema con el juego? ¿No es ese el que querías?

Sí, es el que quería, está bien. Adrián respondió con sarcasmo.

La sonrisa abandonó el rostro de Juan y se quedó abatido ante la clara decepción en la voz de Adrián. Después de todos los problemas por los que pasó Juan para conseguirle lo que quería, esperaba que él apreciara más su regalo. Juan estaba madurando mucho más rápido que Adrián, tanto física como emocionalmente. Juan había llegado a aprender la alegría de dar a alguien un regalo bien pensado y, de hecho, disfrutó dar más que recibir. Pero Juan, en muchos sentidos, todavía era solo un niño y se tomó un poco mal el aparente rechazo. En lugar de dejarlo pasar, empujó un poco el tema.

Si ese es el juego que querías, ¿por qué estás enfadado? preguntó, sintiéndose un poco rechazado, con los ojos llorosos muy levemente.

Fue en este punto que Adrián mostró exactamente por qué todavía necesitaba que le bajaran los pantalones y los calzoncillos y que le azotaran su trasero travieso como si tuviera 5 años.

Recogió el juego y se lo arrojó a Juan gritando: Toma, te gusta tanto, juega.

La esquina del juego dio en el brazo de Juan y dejó escapar un leve aullido. No es que le doliera mucho, al menos no físicamente, pero sí que le pilló por sorpresa. Pero justo cuando Juan estaba a punto de ponerse de pie y gritarle al pequeño desagradecido, la madre de Adrián habló.

¡Adrián!, ¿Qué diablos te ha pasado? Su madre estaba estupefacta y avergonzada por lo absolutamente infantil que se estaba comportando con su invitado. Se acercó a su hijo, lo agarró del brazo y lo levantó de la silla.

El corazón de Adrián ya comenzó a latir con fuerza en su pecho. Tenía muchas esperanzas de que ahora que era un adolescente sus días de azotes terminarían, pero la mirada en los ojos de su madre le dejó muy claro que estaba tristemente equivocado. Adrián había visto esa mirada muchas veces a lo largo de los años y sabía que le esperaba una zurra. Aún así, mantuvo la esperanza de que ahora que era un adolescente se libraría del castigo infantil.

Adrián entró en pánico cuando su madre lo agarró y lo levantó. Sintió que su estómago se revolvía profundamente dentro de él mientras su corazón saltaba hasta el fondo de su garganta. Rápidamente miró a sus amigos. Mientras que Iker, Toni y Marc tenían sonrisas en sus rostros, Juan tenía una mirada mortalmente seria en la suya.

El silencio de la madre de Adrián le decía mucho. Su madre trató de nunca azotar con ira y el hecho de que ella estaba trabajando duro para mantener la calma y el control realmente solo reafirmó que su trasero pronto pagaría el precio de su indiscreción infantil.

Adrián se resignó a que lo arrastraran a la casa y tal vez lo arrastraran hasta su habitación, donde su madre le desnudaría el trasero y le broncearía el trasero con su confiable cepillo de madera, como solía hacer cuando él se portaba mal. Estaba agradecido de que su habitación daba al frente de la casa y no a la parte trasera donde estaba la terraza. Con el aire acondicionado encendido en la casa y todas las ventanas cerradas, tal vez sus amigos no serían capaces de averiguar qué sucedió realmente cuando lo arrastraron adentro.

Pero cualquier esperanza de que los azotes de Adrián pasaran desapercibidos por sus amigos se hizo añicos cuando su madre agarró los pantalones cortos elásticos que llevaba puestos y se los bajó hasta que le cayeron hasta los tobillos.

¡NO! Mami, por favor no me pegues aquí delante de mis amigos. Lloró, las lágrimas ya comenzaban a formarse en sus ojos ante la repentina e inesperada exposición de sus ajustados calzoncillos blancos.

El pánico se apoderó de Adrián y se sintió abrumado por la vergüenza insoportable que ahora estaba sufriendo. Allí estaba él, con 12 años y hace solo unos momentos, 4 de sus amigos más cercanos le cantaban el cumpleaños feliz . Ahora estaba parado allí, su madre agarrando con fuerza su brazo mientras sus pantalones cortos estaban en sus tobillos y sus calzoncillos ajustados a la vista de sus amigos.

Sus amigos, incluso Juan, no pudieron evitar reírse en voz baja en el sitio del pobre Adrián parado allí con aspecto de niño de 5 años con sus calzoncillos infantiles a la vista. Ninguno de ellos habría sido atrapado en calzoncillos ajustados y cada uno de ellos llevaba calzoncillos o calzoncillos bóxer. Si bien ninguno de ellos realmente lo pensó dos veces antes, de repente, los 4 de forma independiente comenzaron a darse cuenta de lo mucho más joven que se veía Adrián del resto de ellos. Él parado allí en ropa interior, su mamá llevándolo hacia un banco cercano, realmente hizo que el niño pareciera mucho más joven que sus 12 años.

Juan especialmente comenzó a notar que Adrián se parecía mucho más a su bebé de 8 años y menos a un adolescente como él. Adrián era prácticamente del mismo tamaño que su hermano pequeño y tenía la misma mirada de niño pequeño en su rostro. Juan no pudo evitar mirar el bulto prácticamente inexistente en la parte delantera de los calzoncillos de Adrián. Juan se había vuelto muy consciente de cómo se estaban desarrollando sus propios genitales y el pene cada vez más largo que tenía ahora. 

Como la mayoría de los niños de su edad, Juan solía explorar sus genitales en la privacidad de su cama justo antes de quedarse dormido. Le gustaba pasar los dedos por su pequeño pene y estaba fascinado con el calor que irradiaba su ya impresionante erección de 5 pulgadas. A menudo lo envolvía con la mano para calentar sus dedos helados, lo que envió un escalofrío arriba y abajo de su cuerpo. Por supuesto, su exploración pronto lo llevó a tener un orgasmo y eso también se convirtió en una sensación que no pudo evitar querer explorar más. Acababa de asumir que todos sus otros amigos se veían iguales allí abajo, pero ahora mirar la falta de bulto de Adrián lo hizo dudar. Su hermano pequeño tenía un bulto más grande en sus calzoncillos que Adrián parecía estar haciendo en sus calzoncillos ajustados. Era una imagen que solidificó la idea de que Adrián se parecía más a un niño pequeño y menos a un adolescente. Su hermano pequeño tenía un bulto más grande en sus calzoncillos que David parecía estar haciendo en sus calzoncillos ajustados.

Mientras Juan observaba la escena que se desarrollaba ante él, los sentimientos melancólicos que estaba experimentando por el hecho de que Adrián rechazara su regalo pronto fueron reemplazados por un placer culpable al ver que Adrián recibía su merecido. Adrián estaba actuando como un niño mimado y Juan estaba ciertamente feliz de ver que le bajaban los pantalones y aún más feliz de ver que, como el niño pequeño que era, Adrián todavía usaba calzoncillos blancos de niño. Diablos, incluso el hermano de 8 años de Juan se graduó en calzoncillos hace años, queriendo parecerse más a su hermano mayor. Pero el pobre Adrián estaba atrapado en calzoncillos ajustados y ahora todos sus amigos lo sabían. Mientras Juan continuaba mirando al niño de aspecto patético que su mamá arrastraba, sintió que su pene se agitaba en sus calzoncillos. Pronto creció a su longitud completa de 5 pulgadas y estaba empujando la parte delantera de sus pantalones cortos.

Adrián, por otro lado, estaba mortificado. ¿Cómo podía su madre bajarle los pantalones delante de sus amigos de esa manera? Ahora todos sabían que todavía estaba obligado a usar ropa interior ajustada como un niño pequeño. Le había rogado y suplicado a su madre que le comprara unos calzoncillos tipo bóxer como los que usaban todos sus amigos y todo lo que ella decía era, ya veremos. Cada día que tenía que ponerse los calzoncillos vivía con el temor de que se descubriera su vergonzoso secreto. Siempre tuvo mucho cuidado de asegurarse de que la cintura de sus calzoncillos nunca se mostrara por encima de sus pantalones. Con frecuencia veía calzoncillos bóxer en sus amigos y compañeros de clase, lo que servía como un recordatorio constante de que él y solo él usaban calzoncillos ajustados entre sus compañeros. Ahora, ese secreto estaba fuera y en plena exhibición para que 4 de sus mejores amigos lo vieran.

Su situación no terminó con la exposición de sus calzoncillos a sus amigos, eso por sí solo ya habría sido suficientemente malo, pero el hecho de que su madre los expusiera al bajarle los pantalones en preparación para una azotaina lo empeoró mucho más. ¿Cómo podría volver a mirar a sus amigos a los ojos sabiendo lo que estaban a punto de presenciar? A medida que los pensamientos fluían por su cabeza, realmente comenzó a entrar en pánico cuando se dio cuenta rápidamente de que su madre casi siempre lo golpeaba en el trasero desnudo. Al darse cuenta de que sus calzoncillos también estaban en peligro de ser bajados, Adrián comenzó a temblar y temblar con ansiosa anticipación de que su exposición a sus amigos aún no estaba completa. A pesar de lo vergonzoso que era ser visto con sus calzoncillos ajustados, de repente significaban todo en el mundo para él, ya que eran lo único que impedía su exposición total.

Aún así, lloró, mami, lo siento. Por favor, no me azotes , mientras sus ojos se humedecían por la vergüenza y la vergüenza que estaba sufriendo. ¿No podemos al menos entrar? Por favor, no me azotes aquí delante de todo el mundo. Pero sus súplicas no parecieron tener impacto en la determinación de su madre de hacer justicia rápida y firme a su pequeño travieso. Él la había avergonzado por su comportamiento y ella no sintió la necesidad de evitarle una vergüenza a cambio. Su amigo había sido testigo de su mal comportamiento, por lo que también deberían ser testigos de su castigo.

Sabía que no debía resistirse activamente a su madre. Todavía era mucho más fuerte y más grande que él y luchar contra ella habría sido un gran error. Pero estaba paralizado por el miedo y la vergüenza y estaba rígido e inmóvil mientras trataba de escapar de la realidad de que le bajaran los pantalones de esa manera frente a sus amigos. A pesar de su resistencia pasiva, su madre no tuvo problemas para arrastrar al niño pequeño desde donde estaba hasta un banco en la terraza donde ella se sentó.

Adrián se sintió tan impotente y vulnerable cuando su madre lo llevó al banco. En algún momento de ese proceso, los pantalones cortos se le salieron de las piernas, de modo que sus ajustados calzoncillos blancos eran la única prenda que tenía puesta de cintura para abajo. A pesar de que era un cálido día de verano, sintió un escalofrío recorrer su cuerpo y se estremeció un poco cuando la cálida brisa de verano sopló sobre sus piernas ahora completamente desnudas. Podía oír los latidos de su corazón en sus oídos y temblaba incontrolablemente, pero estaba tan abrumado por las emociones que era difícil procesar cuán completamente humillado estaba realmente el niño.

Mientras todo sucedía tan rápido, aún logró mirar a sus amigos mientras observaban la escena que se desarrollaba rápidamente ante ellos. Uno por uno, sus ojos llorosos se encontraron con los de ellos, cada uno con su propia expresión, pero todos con la misma alegría silenciosa al ver cómo arrastraban al niño malcriado hacia el banco.

Adrián se volvió una vez más hacia su madre, con los ojos húmedos por las lágrimas que ya corrían por sus mejillas y cerró los ojos con fuerza esperando que le bajaran los calzoncillos en cualquier momento. De repente, sintió que su cuerpo caía por los aires mientras lo subían al regazo de su madre. Sintió que su camiseta se levantaba ligeramente cuando su madre colocó su brazo sobre su cintura para estabilizarlo para la inminente nalgada. Antes de que pudiera siquiera registrar lo que estaba sucediendo, sintió el fuerte golpe en su trasero cuando su madre pasó su mano por la parte trasera de su ropa interior.

Sucedió tan rápido que Adrián gritó sorprendido: ¡AY! Mami, no, por favor, no me pegues.

Al principio, se sintió mortificado por la realidad de recibir una azotaina por encima de la rodilla frente a sus amigos, pero se sintió aliviado de que sus calzoncillos, por vergonzosos que fueran, permanecieran en su lugar. También se alegró de que su madre no recuperara el cepillo de madera para el cabello que era su herramienta favorita para azotar. Su ligero alivio duró poco cuando su madre una vez más bajó la mano sobre la parte inferior de su ropa interior.

¡AY! Mami, por favor, gritó al darse cuenta de que, si bien sus calzoncillos podrían haberlo evitado la indignidad de tener su trasero al descubierto, hizo poco para protegerlo de la mano firme de su madre. Y si bien su mano puede no haber tenido el mismo ardor que el cepillo para el cabello, todavía causó una impresión suficiente en su tierna y pequeña parte trasera como para hacerlo llorar.

¡AZOTE!, ¡ AY! ¡MAMI! NO, por favor no me pegues. , se lamentó cuando comenzó a llorar incontrolablemente ahora.

Con cada golpe en su trasero, las lágrimas y el llanto se intensificaban y sus súplicas incontrolables solo aseguraban a su madre que sus azotes estaban teniendo el efecto deseado.

Mientras continuaban las bofetadas, Adrián se retorcía y se movía en el regazo de su madre. Su madre nunca esperó que se quedara quieto o estoico para una azotaina. De hecho, si Adrián se hubiera acostado sobre su regazo y hubiera recibido cada azote sin siquiera un gemido, habría sentido que los azotes estaban perdiendo su eficacia. El hecho de que tuviera que volver a colocar al niño que luchaba en su regazo le aseguró que estaba transmitiendo su mensaje.

¡Azote!, ¡ Ay, mami, no! 
¡Azote!, ¡ Por favor mami, lo siento! 
¡Azote!, ¡ No me pegues más!

Pronto estaba llorando como un bebé y no se podía discernir nada de sus súplicas. Sus súplicas coherentes pronto fueron reemplazadas por llantos y sollozos discordantes mientras los azotes lo reducían a un niño pequeño contrito y arrepentido.

Juan se sentó, a meros pies de distancia, y se encontró hipnotizado al ver el breve trasero cubierto de Adrián mientras se meneaba y forcejeaba sobre el regazo de su madre. La camiseta de Adrián ahora estaba levantada hasta los hombros. El ligero bronceado de la piel de Adrián después de un verano de pasar el rato en la piscina hizo que los calzoncillos blancos brillantes se destacaran aún más. A pesar del ligero sentimiento de culpa por ser el catalizador de los azotes de Adrián, Juan disfrutó mucho al ver a su amigo reducido a un niño llorón. 

Hacía que Juan se sintiera mucho más masculino y superior y le gustaba la sensación. Una sensación que estaba teniendo un tremendo impacto en la dura erección que ocultaba en sus pantalones cortos.

Juan observó con fascinación cómo el culito de Adrián se retorcía en el regazo de su madre. Miraba fijamente mientras él tensaba su trasero anticipándose al siguiente azote, un movimiento que hacía que sus calzoncillos se apretaran contra su trasero y hacía claramente visible la forma de sus glúteos redondeados. Juan imaginó cómo se vería su trasero sin la mínima proyección de sus apretados calzoncillos y se encontró comenzando a respirar más pesado y más rápido con los pensamientos.

Mientras Juan observaba cada azote golpear el trasero de su pobre amigo, con cada grito y cada llanto, Juan sintió un hormigueo en su pene.

¡Azote!, ¡ AY, NO! Adrián lloraba entre sollozos mientras las lágrimas corrían libremente por sus mejillas y caían suavemente sobre la cubierta de abajo.

Cuando Adrián se redujo a un niño pequeño que sollozaba y lloraba, se había olvidado del hecho de que sus amigos estaban allí presenciando todo y, en cambio, solo se estaba concentrando en la sensación de escozor en su trasero. Era como casi todos los otros azotes que había recibido antes. Al principio, parecía que nunca terminaría, pero finalmente se detuvieron. Por lo general, le tomó unos minutos darse cuenta de que los azotes se habían detenido, ya que al final estaría llorando incontrolablemente. Con 12 años de experiencia azotando a su travieso hijito, su madre sabía exactamente cuánto tiempo y con qué fuerza debía azotarlo para conseguir el efecto deseado sin que se volviera excesivo. Se había llegado a ese momento y sostuvo a su hijo sobre su regazo mientras el niño seguía llorando durante unos minutos.

Juan seguía mirando la parte inferior cubierta de los calzoncillos de su amigo, concentrándose en la parte superior de sus piernas donde se encontraban con sus calzoncillos. Juan podía ver la ligera curva de las mejillas de Adrián sobresaliendo por debajo de sus calzoncillos y el enrojecimiento de su trasero allí como evidencia de cuán efectiva había sido la azotaina. Sería un espectáculo que Juan recordaría durante mucho tiempo.

Juan miró a los otros chicos y notó que sus sonrisas y risitas habían sido reemplazadas por un silencio avergonzado. Seguro que todos secretamente disfrutaron ver los pantalones de Adrián bajados y su pequeño trasero travieso recibiendo el castigo que tanto merecía, pero aun así, estaban avergonzados por su amigo. Después de todo, este todavía era su cumpleaños y todavía había un pastel y un helado sin comer. No había duda de que presenciar la azotaina, sin importar cuánto lo hayan disfrutado en secreto, arruinó seriamente la fiesta. De repente, Juan se sintió culpable por disfrutar los azotes de Adrián y su erección disminuyó rápidamente cuando la culpa se apoderó de él.

La madre de Adrián levantó al niño de su regazo. A estas alturas, su llanto había disminuido de un llanto incontrolable a un sollozo silencioso, pero todavía estaba bastante molesto. Se quedó allí secándose las lágrimas de los ojos, momentáneamente ajeno al hecho de que estaba parado allí con su trasero cubierto a la vista. Sus pantalones cortos todavía estaban tirados en el suelo donde se le habían resbalado mientras lo arrastraban hacia el banco.

Mientras Juan observaba a Adrián parado allí limpiándose las lágrimas y tratando de recuperar la compostura, comenzó a darse cuenta de lo débil, pequeño y vulnerable que se veía su joven amigo. Si bien Juan era solo unos meses mayor, de repente se encontró mirando a Adrián de la misma manera que miraba a su hermano menor. Se preocupaba por Adrián, se preocupaba mucho por él. Estaba empezando a sentir lástima por él y por lo indefenso e inocente que se veía en esos calzoncillos ajustados, ahora apretados en su raja inferior dejando poco a la imaginación. La vista de un Adrián pequeño y derrotado hizo que Juan quisiera caminar hacia él y abrazarlo y sin pensar que eso era exactamente lo que comenzó a hacer.

Cuando la madre de Adrian vio que Juan se acercaba, le dio un codazo a Adrián para que se disculpara con Juan por arrojarle la caja. Juan se paró frente a su amigo y se dio cuenta de cuánto más alto que él era. Miró al niño que estaba de pie frente a él en sus diminutos calzoncillos.

Lo siento, Juan. Gracias por el regalo. Oyó que le decía el chico entre sollozos reprimidos.

Escuchar el remordimiento genuino de su amigo y la voz mansa y contrita hizo que el pulso de Juan se acelerara. Extendió la mano y colocó sus brazos alrededor del niño más pequeño y lo abrazó. Adrián apoyó la cabeza en el hombro de Juan y dejó escapar algunos sollozos más y lloró un poco al sentir el calor del cuerpo de su mejor amigo. Instintivamente, Adrián colocó sus brazos alrededor de Juan y lo abrazó con fuerza mientras su llanto comenzaba de nuevo al revivir la mala forma en que trataba a su mejor amigo. Juan frotó la espalda del niño y le susurró suavemente al oído que lo perdonaba y que estaba contento de haberse dado cuenta de la forma infantil en que había estado actuando. Sintiendo el temblor de Adrián, aún llorando, su cuerpo cerca del suyo, estaba causando que el pene de Juan se agitara una vez más en sus pantalones cortos y una extraña sensación irradiara desde su estómago e ingle.

Juan apretó al niño contra él mientras su ingle presionaba el estómago de Adrián. Juan, todavía frotando la espalda del niño, encontró que sus manos se movían más y más abajo de su cuerpo hasta que sus manos estaban contra la cintura de los calzoncillos de Adrián. Sintió un ligero escalofrío recorrer su cuerpo al sentir la cinturilla elástica de los calzoncillos ajustados del chico y el recuerdo de cómo su mejor amigo todavía estaba allí de pie en tan sólo sus calzoncillos. Quería desesperadamente pasar sus manos por el breve trasero cubierto del chico, para sentir el calor que irradiaba a través de su ropa interior debido a sus recientes azotes, pero tenía miedo de hacerlo. Mientras estaba allí, con las manos apoyadas en la parte superior de los calzoncillos de Adrián, incluso se imaginó colocando sus manos dentro de los calzoncillos de Adrián y sintiendo su trasero desnudo recién azotado. Tragó saliva y su pulso se aceleró a medida que crecía el deseo de tocar el trasero del chico, pero en el fondo sabía que simplemente no podía justificar sus acciones. Le dio a su amigo un fuerte apretón final y sin pensarlo le dio un beso en la mejilla antes de soltarlo y dar un paso atrás.

Mientras saboreaba la salinidad de las lágrimas del rostro de Adrián, al instante se arrepintió de haberlo besado. Rápidamente miró a los otros chicos sentados allí, pero no podía decir lo que estaban pensando. No podía creer que acababa de besar a su mejor amigo, pero sentía tanta lástima por el niño indefenso, de pie allí llorando con solo sus calzoncillos de niño para proteger su modestia. Si bien sintió que merecía los azotes que recibió, también se sintió mal por el niño por tener que soportar la humillación frente a todos sus amigos y sus instintos protectores se activaron. Así fue como se sintió cuando vio a su hermanito llorando o herido y a menudo lo abrazaba y lo besaba también. No quiso decir nada con el beso más que decir cuánto se sentía mal por su pobre amiguito, pero también mostró cómo Juan ya no veía a Adrián como un igual. sino como un niño pequeño que necesitaba su protección y guía. Cambiaría su relación durante mucho tiempo.

Por suerte, la madre de Adrián rompió la tensión al declarar que lamentaba tener que castigarlo pero que él se alegraba de ver que había aprendido la lección y que todos lo habían perdonado. Le dijeron que recuperara sus pantalones cortos, entrara y se lavara la cara y cuando volviera a salir, todos podrían fingir que nunca pasó nada y que ella serviría el pastel.

Adrián, de repente recordó que estaba parado allí con sus calzoncillos a la vista, rápidamente recuperó sus calzoncillos y se vistió rápidamente. Entró corriendo a la casa mientras los otros 4 niños se miraban unos a otros inseguros de cómo actuar después de los eventos que acababan de presenciar. Por su parte, Juan se sentó allí procesando las complejas emociones que acababa de experimentar.

Juan no creía que fuera gay, ya que a menudo se encontraba mirando a las chicas del vecindario y fantaseaba con cómo se veían desnudas. Tampoco se encontró fantaseando con otros niños, pero ver a Adrián en calzoncillos y cómo apenas los llenaba, escucharlo llorar como un niño pequeño mientras observaba a su madre azotar su trasero de niño travieso desencadenó algo en Juan que nunca antes había sentido. .

Esa noche, cuando Juan estaba solo en la cama, cerró los ojos y repitió la escena en su cabeza. Mientras se imaginaba de nuevo que le bajaban los pantalones cortos a Adrián dejando al descubierto sus apretados calzoncillos, se quedó sin aliento al verlo. Se imaginó a sí mismo mirando la parte delantera de los calzoncillos de Adrián que ocultaban lo que debe haber sido un pene pequeño e inmaduro mientras sentía crecer su propia erección de 5 pulgadas en su mano. En su fantasía, imaginó que esta vez su madre le bajaba los calzoncillos al niño y dejaba al descubierto su pequeño pene sin vello. Si tan solo Juan supiera que su fantasía era precisa y que Adrián era de hecho totalmente calvo y pequeño abajo, habría hecho que su fantasía fuera aún más poderosa. Acarició su vara en crecimiento lentamente mientras imaginaba bofetada tras bofetada cayendo sobre el pequeño trasero indefenso de Adrián y escuchó el eco de sus gritos y súplicas mientras el asalto continuaba en su trasero desprotegido. Tan pronto como las imágenes de los eventos del día se reprodujeron en su cabeza, embellecidas por la imaginación de Juan, una vez más sintió que su cuerpo se estremecía cuando un fluido delgado pero pegajoso escapó de su pene palpitante. Cuando Juan recuperó un pañuelo para limpiar la evidencia, la experiencia lo confundió. Entendió por qué pensar en las chicas desnudas de su clase le provocaba estos sentimientos tan poderosos, pero le llevaría un tiempo entender por qué ver a su mejor amigo azotado y llorando tenía el mismo efecto en él. una vez más sintió que su cuerpo se estremecía cuando un fluido delgado pero pegajoso escapó de su pene palpitante. 

Eso fue hace más de un año, y Adrián, que ahora tiene 13 años, se preguntó si tal vez este sería el año en el que finalmente superaría que le azotaran el trasero. Dado que recibió una nalgada menos de un mes antes de cumplir 14 años, no era razonable que Adrián considerara la idea y sería menos de una semana después cuando descubriera lo equivocado que estaba. Y la peor parte de esa nalgada sería que su mejor amigo Juan, una vez más, estaría allí para presenciarlo.



RUTH, RECIBE UNA AZOTAINA DEL DIRECTOR

—¡Levántate! —Cuando ella se levanta, cruzo la habitación. Mi paso es lento y digno. Me siento en el sofá haciendo que los muelles crujan ru...