lunes, 1 de febrero de 2021

Tengo que cuidar de mi sobrina






Cuando me dijeron que tendría que hacerme cargo de Alma, (mi sobrina de 12 años) no sabía que pensar, hasta entonces siempre había sido un hombre soltero, acostumbrado a la soledad y no sabía que tan preparado estaba para manejar una adolescente durante un largo período de tiempo.

Sus padres iban a salir de viaje al Africa, en una de esas misiones de rescate con las que soñabamos cuando teniamos todos la edad de mi sobrina, (mi hermano su esposa y yo fuimos amigos desde el colegio), en las que al parecer salvábamos a todas las personas con hambre y azotadas por la violencia. Yo me rendí hace años al notar que muchas personas no quieren ser rescatadas y me dediqué a ayudar en otras formas, menos lejanas y un poco más seguras.

Mi hermano y su esposa se  graduaron como médicos y toda la vida quisieron ser parte de médicos sin fronteras. Con Alma en una edad en la que necesitaba una supervisión permanente, y visto que tal vez pasaran varios años allí, decidieron dejarla conmigo mientras terminaba el colegio.

Mi relación con ella siempre fué buena, aunque esporádica, la veía menos de lo que me gustaría aunque siempre había sido una chica tranquila y poco problemática. más bien demasiado tranquila para ser adolescente. Poco la conocía yo.

El día en que llegó a casa todo se desarrolló con tranquilidad, ella se veía calmada, incluso orgullosa de que sus papás se fueran en esa misión, recuerdo mucho la conversación que sostuvimos los cuatro.

Bueno Alma - dijo su mamá - ya estás instalada, tal como querías (hasta aquí yo no sabía que había sido idea suya quedarse conmigo en lugar de acompañarlos) ahora quiero que te queden claras varias cosas: primero, tu tío tiene total autoridad sobre ti, le harás caso en todo lo que te pida incluso aunque no te guste entendido?; "si mamá" - fue su respuesta además el tiene el derecho de castigarte como lo considere apropiado entendido? -ella se sonrojó un poco, cosa que me llamó la atención, antes de contestar- sí mamá.

Luego acordamos las reglas de casa:  a casa directo del colegio, en cama a las 10 de la noche todos los días, no salir sin permiso y en caso de salir, debería estar en casa a mas tardar a las 8 de la noche entre semana o a las 9 los fines de semana. Además debería siempre tener buenas claificaciones, obedecer siempre lo que le pidiera y ser respetuosa en todo momento.

Una última cosa - dijo mi hermano- quiero que tu tío apruebe siempre tu forma de vestir, si él dice que no debes ponerte algo, es su decisión, no quiero más jeans de esos a media nalga, ¿Entendido? - ella se sonrojó visiblemente y su expresión fue de rebeldía, pero luego me miro y simplemente dijo - si señor.

Después de la charla, salimos para el aeropuerto nos despedimos en la entrada del muelle internacional y esperé con ella a que el avión despegara, ella me abrazó y lloró un poco, como era de esperar.

De regreso a casa ella estaba muy excitada, hablando conmigo sobre todas las cosas divertidas que podríamos hacer y sobre como sería la primera vez que ella estaría lejos de sus papás.

No te hagas muchas ilusiones - le dije medio en serio medio en broma - yo puedo ser mas estricto que tu papá. Ella se quedó mirándome muy seria, justo a los ojos con sus ojos verdes (o lo que podía pues yo iba manejando) luego sonrió y dijo "si tito".

Al llegar a casa ella fue a acabar de deshacer la maleta y después vino a verme : tito puedo hablar contigo?

-Claro nena siéntate- le dije señalandole una silla de la sala

-Quiero hacerte una pregunta-

-adelante- dije sorprendido por la seriedad del tono para una niña de 12 años

-¿Como piensas castigarme?-

La pregunta me tomó totalmente por sorpresa realmente no lo había considerado hasta ese emomento. Creo que en realidad esperaba que no fuese necesario.

-No lo he decidido aún, ¿Como crees que debería hacerlo?

Ella bajo la vista a sus manos, se veía nerviosa, como reuniendo el valor para decirme algo.

- La verdad es que de los castigos de papá y mamá no funcionan, como ellos dijeron que podías darme cualquier castigo, creo que deberías darme nalgadas cuando lo consideres necesario-

Esa era la última declaración que yo me esperaba de mi sobrina. me quedé callado durante un momento y entonces todas las piezas comenzaron a encajar. ella tenía curiosidad por ese tipo de castigos que nunca le habían dado, así que convenció a sus papás de dejarla conmigo, esperando convencerme de que yo los usara (por eso se sonrojó cuando su mamá dijo eso), y esperaba que la tomará en serio.

- ¿Como crees que funciona eso?  aventuré

Eso pareció quitarle un peso de encima, se nota que lo había pensado mucho. - bueno, pues tu eres mi tito cierto? así que si consideras que yo me he portado mal, puedes decidir castigarme con unas nalgadas o unos correazos o lo que sea, y yo no puedo decir nada al respecto, cuando tu creas apropiado y como tu lo creas apropiado, como dijo mamá 

- ¿Es decir que no vas a protestar?

-Seguramente si, y seguramente te pediré que no lo hagas, pero igual es tu decisión y yo no la puedo cambiar.

- ¿Tienes claro que va a dolerte el culete? y que no va a ser divertido

-¡Claro! - dijo soltando una carcajada- no sería castigo de otra forma

Yo me quede pensando un mamento, por un lado no me gustaba la sensación a trampa que todo esto me daba, y por otro quería que ella supiera en lo que se metía.

-Déjame aclarar esto, para castigarte, tú crees que yo estoy en mi derecho de darte una zurra cuando y como yo quiera si lo considero adecuado y tu vas a obedecerme?

-Sí tito- dijo ella con firmeza

- Muy bien pues, acordado -ella sonríó de oreja a oreja.

- Pero creo que es justo que tu sepas a lo que te comprometes

Me levanté y tomé una silla del comedor y la traje a la sala sentándome en ella

- Ponte de pié y ven aquí. 

 Ella trago saliva pero obedeció

- Pon las manos en tu cabeza

Ella obedeció mientras me miraba con los ojos muy abiertos como yo comenzaba a desabrocharle el pantalón 

-¿Tito, no, que haces?

- ¿Cuándo y como yo lo considere apropiado recuerdas?

Ella trago saliva pero no dijo nada. Al bajarle los pantalones a las rodillas la deje allí mirandome un momento con solo sus braguitas rosas puestas.

-Una zurra bien dada es siempre con el culete al aire, - le dije, mientras procedía a bajarle tambien los braguitas.

Ella hizo ademán de moverse hacia a trás pero la sujete de la cadera y la acerqué, sus mejillas estaban rojas lo que contrastaba con sus ojos verdes y su largo cabello castaño

-Ponte en mis rodillas -le dije, cosa que ella hizo de inmediato para tratar de cubrirse al estar acostada, lo que no sirvió de mucho cuando la acomodé sobre mis rodillas con el culete bien alto 

- Ahora voy a decirte como funciona, tus manos deben estar siempre al frente, si tratas de cubrirte voy a hacer más duro tu castigo, no debes tratar de levantarte tampoco entendido? - si tito- fue su respuesta

En ese momento coloque mi mano derecha sobre sus nalguitas desnudas, - como no has hecho nada aún, este no va a ser el peor castigo que recibirías, será el mínimo. Si quieres ensayar como puede ser peor sólo debes romper las reglas y lo sabrás. 
Este es un castigo, por lo tanto no voy a detenerme aunque me lo pidas hasta que esté convencido de que entendiste el mensaje entendido? - ella paso saliva " si tito".

Entonces levante mi mano derecha y comencé el castigo dándole fuerte desde el principio plasss plassss plasss plassss primero en una nalga y luego en la otra.

aaayyyyyyyyyyyy ooooooowwwww fueron sus reacciones desde el comienzo del castigo, a las pocas nalgadas ya estaba empezando a patalear y despues de cerca de un minuto parecía un nadador en una competencia.

Vas a obedecerme en todo lo que te diga plasss plassss plasssplasss plassss plasssplasss plassss plasss

SSSSSSSSSSSSSSIIIIIIIIII LO PROMEEEEEEEETOOOOO AAAAAAAYYYYYY OOOOWWWWW

SI QUE??? plasss plassss plasss plasss plassss plasss

SIIII TITOOO AAAYAYAYYYYYY NO MAAAAAAAAAASSSSS

A esta altura sus brazos también trataban de agarrar algo en frente y ella sacudía su culito de lado a lado como tratando de esquivar las nalgadas

plasss plassss plasss plasss plassss plasssplasss plassss plasss plasss plassss plasss vas a cumplir todas las reglas !!

AAAAAAYYYYYYYYYY AAAAAAAAUUUUUUUUUUU AYAYAYAYAYYYYYYY SIIIIII TITOOO

Finalmente una de sus manos fue a cubrir su adolorido culo para tratar de detener el castigo, empezando a llorar.

Yo simplemente le sujeté la mano a la espalda y comence a azotarle fuerte el punto en donde las nalgas se unen a las piernas, el sitio en el que se sienta

plasss plassss plasss Te advertí  plasss plassss plasss que no plasss plassss plasss pusieras plasss plassss plasss las manos plasss plassss plasss plasss plassss plasss plasss plassss plasss

Esto tuvo una reacción inmediata que fué un solo grito de dolor y un incremento en el pataleo

PERDOOOOOOOOOOOOOOOOOONNNNNNNNNNN

NO MAAAAAAAAS  POR FAVOOOOORRRRRR PERDOONNNNNNN SERE BUENAAAAAAAAA BWAAAAAAAAAAA BWAAAAAA

El castigo siguió hasta que conté 300 nalgadas.

Casi como un resorte, ella se levanto de mis rodillas llevó las manos a la cola y comenzo a bailar haciendo círculos y saltando mientras cambiaba el peso de un pie al otro.

Toda noción de modestia había desaparecido en función del ardor de su culito, a juzgar por el espectáculo que estaba ofreciendo

Luego de un momento me levanté, la tomé del brazo y la lleve a una esquina de la sala

- Pon las manos en la cabeza y quedate en esa posición hasta que te lo diga

Ella estaba llorando tan fuerte aún que la única respuesta fué un asentimiento de cabeza. Yo me senté en la sala, observando el resultado de mi labor y esperando, que con esta experiencia, ella renunciaría al acuerdo de arreglar la disciplina con palizas. Lo que sucede es que nunca he sido muy bueno para juzgar el pensamiento de los adolescentes.

Una hora despues, cuando ella había dejado de llorar, fui a decirle que podía moverse.

- Puedes irte - le dije. Su reacción fue darse vuelta y lanzárseme al cuello en un enorme abrazo.

Empezó a llorar nuevamente, así que le devolví el abrazo esperando que se calmara.

- Gracias tito - me dijo al recuperar el habla - gracias por mostrarme un castigo de verdad y por aceptar encargarte de mi. Te prometo que me voy a portar bien y a obedecerte en todo. Ahora se como me vas a castigar si me porto mal.

Allá iban mis esperanzas de rescindir el acuerdo.

- Puedo preguntarte algo tito? - dijo

- Claro nena

- En serio puede ser peor?

- Si nena, mucho peor, aún no has probado ni la correa ni el cepillo ni otras muchas posibilidades

ella abrió los ojos con asombro - en serio usarías esas cosas?

- cuando y como yo lo considere - le recordé

- si tito, fue su respuesta

-ojalá no necesitemos ensayarlos le dije, como tratando de tranquilizarla

- Sí... ojalá - fue su respuesta

Aún quedaba mucho camino por delante con ella

RUTH, RECIBE UNA AZOTAINA DEL DIRECTOR

—¡Levántate! —Cuando ella se levanta, cruzo la habitación. Mi paso es lento y digno. Me siento en el sofá haciendo que los muelles crujan ru...